Solo unos 20 industriales de Can Batlló irán finalmente a la Zona Franca

P. CASTÁN / BARCELONA

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Han hecho falta varios años de negociaciones, tensiones y algunos conflictos para escribir el último capítulo del enorme recinto industrial de Can Batlló, en Sants. Finalmente, y en pleno desmantelamiento del polígono, el Consorci de la Zona Franca (CZF) anunció ayer que ha llegado a un preacuerdo de reubicación con 21 empresarios (20, según los afectados), que suponen un 10% de los 213 contabilizados a finales del 2001.

El recinto fue perdiendo empresas a medida que finalizaban los contratos, hasta el punto de que a mitad del 2006 quedaban 125 industrias. Largas pugnas por las compensaciones y, sobre todo, el realojamiento de los afectados con contratos largos o indefinidos han ido demorando el ocaso de este polígono, cuyo destino a corto plazo es acoger 1.377 pisos y un complejo de equipamientos y zonas verdes. Tal y como avanzó este diario el pasado día 14, unas 45 empresas siguen en la zona pero su realojo dependía de la construcción de las naves necesarias en terrenos de consorcio, que no estarán listas hasta el 2009, y de que el CZF y los afectados alcanzasen un acuerdo.

Cumplido el plazo para formalizar los precontratos, fuentes del consorcio señalaron ayer que los 21 acuerdos permitirán ubicar a dos empresas en una nave en construcción en L'Hospitalet, mientras que el resto tendrán que aguardar a que se levante otra de unos 13.000 metros cuadrados en la calle de Motors, en Barcelona, sin fecha de inicio, y que precisará de un año de obras una vez el ayuntamiento conceda la licencia y remate la modificación urbanística necesaria.

15 AÑOS

Los contratos serán a 15 años, a un alquiler máximo de 7,5 euros el metro cuadrado. Las condiciones son buenas, pero fuentes de la asociación de industriales de Can Batlló se quejan de que otras seis empresas que siguen pendientes de ubicar "no tendrán sitio" en la nave porque por su maquinaria precisan de espacio en planta baja, y no pueden instalarse en la primera planta, donde sí quedarían metros cuadrados suficientes.

A falta de resolver estas últimas cuestiones, la gran mayoría de afectados han optado por trasladarse de forma individual fuera de Barcelona, y hasta un 15% ha liquidado su negocio.