El monasterio de Sant Benet renace con un complejo pionero en España (I)

FERRAN IMEDIO / SANT FRUITÓS DE BAGES

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Món Sant Benet, el complejo cultural y turístico más importante de la Catalunya central, abrió ayer sus puertas a lo grande. La presencia del presidente de la Generalitat, José Montilla, y de numerosos representantes de todos los ámbitos sirvió para dar lustre al acto inaugural de una iniciativa única en España por su concepción. Un monasterio del año 967 rehabilitado, un centro de convenciones donde antes se levantaba una fábrica, un hotel de nueva planta y un instituto gastronómico componen el puzle que ha diseñado Caixa Manresa con un presupuesto de 71 millones de euros y que, tras cuatro años de obras, dará un impulso extraordinario a la economía y la imagen del Bages y las comarcas que le rodean.

"Es un proyecto osado, valiente, de cierto riesgo, pero es una apuesta de futuro ambiciosa que dará éxitos evidentes muy pronto", afirmó Montilla ante las casi 700 personas que congregó un acto que levantó una enorme expectación en Sant Benet de Bages. "Es una idea osada, bien definida y mejor ejecutada", concluyó. El presidente de Caixa Manresa, Valentí Roqueta, había señalado antes los tres ejes sobre los que gira esta idea única en España: "Utopía, ambición y pasión".

Todo comenzó en el año 2000, cuando Caixa Manresa adquirió el monasterio y las 18 hectáreas que lo rodeaban a los descendientes de la familia del pintor Ramon Casas. Su madre lo había comprado en 1907; estaba casi en ruinas. Con la ayuda del arquitecto Puig i Cadafalch, lo convirtieron en segunda residencia. Desde entonces, no se había hecho ninguna otra obra de rehabilitación. Hasta que llegó Caixa Manresa y se inventó el concepto Món Sant Benet (MSB). Aunque ya ha despegado, el espléndido complejo cogerá su auténtica velocidad de crucero en menos de un mes.

EL MONASTERIO

El monasterio de Sant Benet es el único de Catalunya que tiene marcado en su piel de piedra las diferentes épocas desde que fue construido en el siglo X. Arte románico, gótico, barroco y modernista se funden en un edificio compuesto de iglesia, claustro y bodega. A partir de ahora será un museo que permitirá dar un paseo a través de la historia de este espacio mientras fue cenobio benedictino y residencia de la familia Casas. Además, se han abierto dos salas de convenciones de pequeño formato. El monasterio es la imagen y el corazón de MSB, por eso las tareas de restauración se han llevado a cabo con mimo extremo, dejándolas en manos de los arquitectos Javier Asarta y Josep Maria Esquius. No solo se ha rehabilitado, sino que se han realizado excavaciones arqueológicas que han aportado muchos datos sobre el monasterio y sus etapas constructivas. El alcalde de Sant Fruitós de Bages, Josep Rafart, comparó los objetivos del renacimiento del monasterio con los que escribió el noble Sal.la en el acta fun-

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