Carod se enfada con Bargalló por el anuncio de la Bienal de Venecia

El anuncio de que Catalunya estará en la próxima edición de la Bienal de Venecia con un espacio propio causó ayer un profundo malestar en Josep Lluís Carod-Rovira, que considera que recibió información errónea del director del Institut Ramon Llull, Josep Bargalló. El vicepresidente de la Generalitat cree que Bargalló le indujo a anunciar precipitada y erróneamente la presencia catalana en el certamen italiano.

El alcalde de Venecia, Massimo Cacciari, confirmó por carta su apoyo a que Catalunya tenga un espacio en la Bienal, tanto en la de arte del 2009 como en la de arquitectura del 2010. Sin embargo, la respuesta a la solicitud del IRL solo es municipal. La Bienal no ha recibido la petición y, de haberle llegado, no podría contestarla hasta febrero del 2008, cuando se constituya el patronato de la próxima edición. El presidente de la Bienal, Davide Croff, dijo ayer que "cuando llegue la propuesta formal" se valorará "en el tiempo oportuno", según un "reglamento en relación con la participación de los Estados, entes y organizaciones".

La respuesta de Cacciari es un indicio favorable para el proyecto, pero ni admite que la presencia catalana sea en forma de pabellón nacional, objetivo en el que ayer insistió Bargalló, ni deja solo "detalles" que negociar, como la ubicación, que podría ser el Palazzo Fortuny, y un contrato formal que firmar, como dijo el domingo el director del Llull. En la carta se considera "pertinente" la solicitud catalana y se promete que, como alcalde, Cacciari hará todo lo posible para que sea realidad.

PRECIPITACIÓN

El interés de Carod por conseguir un titular el día en que la feria se clausuraba sin que nadie de la Generalitat tomase la palabra desembocó en un anuncio impreciso de una presencia no confirmada. Carod dijo que había contactos para que Catalunya fuese el país invitado --figura que no existe-- en la edición del 2009 con un pabellón nacional propio, igual que Escocia o Gales, cosa que tampoco es cierta.

El mismo domingo, su departamento de prensa informó de que Catalunya había recibido una "invitación" y Bargalló precisó que esta institución había formulado su solicitud y que había recibido también por carta una respuesta "positiva". Ante la confusión creada, el IRL emitió el domingo una nota, en el que precisaba que el alcalde había "aceptado" la participación catalana, que tuvo que rectificar de nuevo ayer.

De hecho, aunque el Llull ha solicitado un pabellón nacional, ni Escocia ni Gales tienen uno. La exposición escocesa es considerada por la Bienal como un "evento colateral" que, según la propia organización de Escocia 2007, "complementa" el pabellón británico. Entre los 76 pabellones nacionales figuran 73 estados, y otros tres agrupan a varios estados de una región.

Los servicios de prensa de Carod también indicaron el domingo que este había "presidido" la clausura de Fráncfort, un acto organizado por la feria en el que no tomó la palabra.