José Feliciano, el 'showman' virtuoso

El músico ofreció clásicos latinos, hitos del pop, digitación ágil y gestos de humor en Luz de Gas

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

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Hace mucho que José Feliciano tiene aprendido su guión escénico, a caballo de la latinidad, la revisión de clásicos del pop anglosajón y la solvencia guitarrística. Temperamento, técnica y, también,entertainmentse desplegaron en Luz de Gas en una sesión agitada y con algo de humor, de la que no pudo disfrutar todo el público: un centenar de asistentes tuvo que contentarse con intuir el escenario, dada la congestión que registró la sala.

A ellos pareció dedicada la primera canción de la noche: "Oye, guitarra mía / Tú que sabes hablar mejor / quiero que tú le digas / lo que siente mi corazón". Poca visibilidad, pero, al menos, vibraciones garantizadas desde unas seis cuerdas con las que Feliciano entró en calor de la mano del venezolano Simón Díaz y suCaballo viejo.Versiones de Dylan (Knockin' on heaven's door) y Stevie Wonder (Superstition) y, el artista, con su voz profunda y cálida en idóneas condiciones de conservación.

Aludió a su ceguera y subrayó que esta es un antídoto fulminante contra el racismo y los prejuicios estéticos. Saltó del bolero (Me has echado el olvido) al rock'n'roll tradicional (That's alright mama), y de este alConcierto de Aranjuez,que le sirvió para confesarse "alumno" de Andrés Segovia. "Aunque no le conocí, ensayaba 14 horas al día", reveló.

Y algunas ruedas de solos instrumentales, y un poco de gesticulación teatral, y bastantes destellos de humor. "Yo era el Ricky Martin de mi tiempo", sentenció. Parodió los arabescos vocales de Julio Iglesias y, también, los tics interpretativos de su hijo Enrique. "Parece estreñido cuando canta". Exhumó otro bolero mayor,La barcay, olfateándose el final, se pasó al pop conCalifornia dreamin',de The Mamas & The Papas, y al rock hispanizado deLight my fire(The Doors), la versión que, en 1968, le llevó a la zona alta delhit paradeestadounidense.

Ya solo faltaba la melancólicaQué será, será,su estribillo más totémico a este lado del Atlántico, coreado sin reservas por Luz de Gas en pleno. Y una filosófica declaración final: "Cuanto más grande ustedes me hacen, más pequeño me siento".