CORONAVIRUS

Críticas municipales a las restricciones aplicadas por la Generalitat para contener el covid-19

Confluencia de las calles Aragó y paseo de Gràcia de Barcelona durante las primeras horas del Toque de queda, el 26 de octubre del 2020

Confluencia de las calles Aragó y paseo de Gràcia de Barcelona durante las primeras horas del Toque de queda, el 26 de octubre del 2020 / periodico

Àlex Rebollo

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La segunda ola del covid-19 crece sin parar en Catalunya. Mientras los expertos ya reclaman medidas “más contundentes”, el Govern de la Generalitat se debate entre implementar un confinamiento domiciliario de 15 días o confinamientos de fines de semana. Municipios como Terrassa, Barcelona, Esplugues o Mataró también reclaman más restricciones para contener la pandemia y ayudar a los sectores económicos más afectados.

El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart (TxT), criticó ya el lunes pasado la "falta de concreción" de la Generalitat y reclamó “claridad” a la hora de anunciar las medidas. "Se informó de un posible confinamiento total, hoy se habla de confinar solo el fin de semana y al final lo que tenemos ahora son restricciones en horario nocturno", lamentó Ballart. El primer edil egarense reivindicó también la opinión de los municipios del área metropolitana a la hora de acordar las medidas. Ballart considera que se podrían modificar algunas "si escucharan las demandas que hacen los sectores económicos desde los municipios".

También el alcalde de Mataró, David Bote, ha pedido al Govern la aplicación de “medidas urgentes” con el propósito de contener la escalada de la pandemia. Actualmente, en la capital del Maresme el riesgo de rebrote está disparado (1.874) y la velocidad de transmisión de la enfermedad es de 1,81. Según ha informado Bote, el consistorio mataronense ha enviado un informe a la administración catalana en el que califica de "insuficiente" el confinamiento nocturno y reclama medidas para reducir la interacción social también durante el día. Aunque no ha propuesto medidas concretas, el primer edil ha apuntado a restricciones que ya se han aplicado en otros territorios, como la limitación de aforo en lugares de culto o el cierre perimetral.

Acompañar las restricciones con más recursos

Una de las voces más críticas ha sido la de la alcaldesa de Esplugues de Llobregat, Pilar Díaz (PSC), quien reprocha la decisión de la Conselleria de Salut de no realizar un cribado masivo en Esplugues después de que el ayuntamiento lo solicitara el pasado sábado. “Además de los cribados masivos, pedimos cribados selectivos en los centros educativos”, ha reiterado Díaz tras conocer la respuesta de la Generalitat.

Aunque desde el consistorio espluguense resaltan que tienen la voluntad de “colaborar y cooperar” con del Govern,  Díaz exige también que se aporten “más recursos y personal” en los CAP de la ciudad y que “se mejore la detección” porque, según la alcaldesa, “hay vecinos que esperan desde hace una semana para realizarse una PCR”.

En la misma línea se ha expresado la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau (Barcelona en Comú), quien, en una entrevista en el programa 'Planta Baixa' de TV3, ha alertado de que los CAPs están “al límite” y ha reclamado que se realicen “las contrataciones necesarias”. Más allá del refuerzo sanitario, Colau también ha solicitado ayudas para los sectores más afectados por los cierres y restricciones. Así, ha destacado que “deberían detenerse inmediatamente todos los desahucios de familias vulnerables”.

Por su parte, el pleno de Sant Boi de Llobregat aprobó por unanimidad el pasado 22 de octubre una declaración institucional en apoyo a los sectores de la hostelería y la restauración y los centros de estética.  De este modo, el Ayuntamiento exige que cualquier medida restrictiva en el ámbito económico vaya “acompañada de compensaciones para paliar las consecuencias" para evitar así el cierre definitivo de muchos de estos negocios.

Reabrir los centros de estética

El alcalde de Badalona, Xavier García Albiol (PP), también ha enviado una carta a la 'consellera' de Salut para pedir la reapertura de los centros de estética y belleza. Albiol justifica esta petición porque, según él, "se trata de un sector seguro, que ha hecho una gran inversión para poder prestar el servicio con las máximas garantías de seguridad y que, está demostrado, no representa un foco de contagio”.