Xavi, antes del Madrid-Barça: "Me pone ir al Bernabéu"

Tercer partido ante el Madrid en la tercera competición. Clara victoria blanca en la Liga (2-1) y clarísimo triunfo azulgrana (3-1) en la Supercopa. El duelo de la Copa del Rey, a diferencia de esos dos precedentes, es un doble pulso de partidos, con la vuelta dentro de un mes en el Camp Nou. Quedará aún el segundo partido de Liga, con lo que se completarán cinco enfrentamientos y donde quedará establecido cuál de los dos grandes impone su jerarquía.

Que se trata de una competición diferente, que el Madrid es el favorito y que el Barça saldrá a competir y a enseñar su modelo de juego fueron las tres bases del mensaje que lanzaba Xavi Hernández antes del segundo viaje al Bernabéu, al que el Barça acude por las dos derrotas consecutivas y tres bajas de futbolistas "fundamentales" en palabras de su entrenador: Pedri, Dembélé y Lewandowski.

Ansu Fati se ha entrenado con el grupo, superado el golpe en la rodilla que le privó de viajar a Almería y a al lista de ha sumado un segundo delantero al canterano Ángel Alarcón: Estanis Pedrola. El nueve titular será Ferran Torres. Xavi tiene "fe ciega" en el valenciano, de quien espera que confirme su recuperación anímica. Por si acaso le reforzó en público. "Soy uno de los culpables de que esté aqui, comentó.

Salir del hospital

Tres bajas y dos derrotas marcan el viaje del Barça a Madrid, pero Xavi se aparta de la estela de pesimismo que invade al club y que dicen que invade al club algunos medios españoles. "A mí me motiva ir al Bernabéu, me pone el Bernabéu, me gustaría volver a tener el balón en el centro del campo", afirmaba, invitando a sus futbolistas a que expulsen sus miedos, si los tuvieran, y "se atrevan, lo intenten y jueguen con personalidad".

El sentimiento optimista y alegre que desprendía Xavi traspasa el momento crítico -"si miramos los dos últimos partidos es como si estuviéramos en el hospital"- que vive el Barça. El técnico está ya "contento" con ser el entrenador del Barça". Y ahora, primero de la Liga con siete puntos de distancia sobre el Madrid, en la semifinal de Copa, campeón de la Supercopa y tras haber "competido" en Europa, aunque eliminado en las dos competiciones, la alegría pasa a un estadio superior.

"Me siento eufórico", confesaba Xavi, que comparaba mentalmente la situación actual con "el sufrimiento" perpetuo de la pasada campaña. "Estamos en una situación privilegiada", recalcó, para que el Barça conquiste los dos títulos españoles.

Favorito el Madrid

Contento y eufórico está Xavi pero también prudente y alerta, con el repetitivo mensaje de proclamar "favorito" al Madrid en su condición de doble campeón de Liga y Champions. La preocupación del técnico azulgrana es puramente futbolística. Se basa en la capacidad camaleónica del Madrid de dominar y dejarse dominar, de encadenar posesiones largas y de armar contragolpes letales.

El Barça solo domina el arte de la posesión y del control del juego y a ello se dedicará. A evitar pérdidas en el centro del campo, a mantener la posesión en la mitad de cancha del rival y a procurar acabar las acciones de ataque para no dar pie a una rápida transición a través de Vinicius. Araujo volverá a ser su secante.