El incompleto puzle del Barça

Al técnico le sobran delanteros y Memphis, que llegó hace un año al Camp Nou por deseo de Koeman, es el último de su lista. Es el séptimo y, por lo tanto, el más prescindible tras los fichajes de Ferran Torres y Aubameyang (enero), más los de Lewandowski y Raphinha en este verano unido a la reinserción de Dembélé y la recuperación de Ansu Fati. Por eso, la Juventus se quiere llevar al neerlandés. Y desea llevárselo gratis, sin abonar ni un solo euro al Barça. 

Ese rompecabezas que está negociando Mateu Alemany con los agentes de Memphis necesitaría una solución urgente, antes incluso de la fecha límite porque ayudaría a la inscripción de Koundé, el único de los cinco fichajes que no está registrado en LaLiga. Si es antes del domingo, mejor aún para Xavi porque podría contar con el excentral del Sevilla en Anoeta en una cita importante ante la Real Sociedad tras el frustrante empate contra el Rayo en el debut liguero.

El Chelsea quiere a Auba

Memphis deseaba quedarse en el Camp Nou, pero con esa lujosa nónima de delanteros que hay se le ha acortado su espacio. De hecho se le ha reducido al máximo. No jugó, por ejemplo, ni un solo minuto el sábado en la primera jornada dejándole claro Xavi que es el último de la fila, pendiente, eso sí, de lo que ocurra, finalmente, con Aubameyang.

Al exjugador del Arsenal sí lo considera el técnico una pieza muy valiosa en su estructura ofensiva, ya sea como recambio de Lewandowski o para cualquiera de las dos bandas, como ya lo empleó ante Pumas y Rayo.

Memphis, en cambio, es la pieza que sobra. A no ser que Auba escoja irse al Chelsea para reencontrarse con Tuchel, el técnico que lo tuvo en el Dortmund, o el United, desesperado como anda el club de Manchester, le seduzca para volver a la Premier. Mientras, la Juventus negocia con el neerlandés un contrato bajo la premisa de que le llegue libre a Turín.

Memphis, camino de su quinta Liga

Libre llegó Memphis a Barcelona, ajustándose su salario a los tiempos pandémicos, y también libre quiere irse a la ‘Vechia Signora’ para compartir ataque con Vlahovic y Di Maria, quien ha sufrido una lesión muscular que le tendrá casi un mes de baja.

Ahora, el delantero negocia su finiquito con el club azulgrana para salir camino de la Serie A italiana, que sería su quinto campeonato europeo tras debutar en la Liga holandesa (PSVEindhoven) , irse luego a la Premier donde no brilló nada (United), establecerse después con éxito en Francia (Olympique de Lyón) y pasar fugazmente por España (Barça).

Salidas que se atascan

La salida de Memphis ayudaría a liberar espacio salarial para inscribir a Koundé. Pero, tal vez, no sea suficiente, obligando al Barça a intentar desatascar los casos que aún siguen pendientes de solución (Umtiti y Braithwaite son los descartes de Xavi que todavía no se han ido), además de agilizar la rebaja en los capitanes, tanto Busquets como Piqué.

Un asunto cada vez más complejo, mientras el Barça busca la vía del traspaso con Dest, el lateral derecho que no cuenta para el técnico, con el objetivo de inyectar dinero que le permitiría acudir, ya con la fórmula del 1 X1 (por cada euro que salga se puede invertir otro euro) en busca de los defensas que necesita el Barça para recomponer su zaga.

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El United también ha mostrado interés en el exlateral del Ajax, lo que le daría músculo financiero a Alemany y Jordi Cruyff para complacer a Xavi. En los días finales del mercado, el Barça intenta rellenar ese puzle incompleto donde sobran delanteros (siete en el vestuario sin contar a Abde, que busca cesión) y centrales (cinco y ninguno zurdo a no ser el descartado Umtiti), pero faltan laterales: solo uno derecho puro.

Es Dest y el técnico no lo quiere. Y solo un lateral izquierdo, a la espera de que llegue Marcos Alonso, procedente del Chelsea. Aunque antes tienen que desbloquearse todos los casos enquistados del vestuario.