El Barça trabaja en la reconstrucción de la defensa

Con el Barça del presente bien encaminado ahora (tres victorias consecutivas e instalado en zona Champions), Mateu Alemany, el director de fútbol del club azulgrana, ya trabaja en la reconstrucción de la plantilla para la próxima temporada. Cerrado, y con éxito el mercado invernal (la llegada de Aubameyang, Adama, Ferran y Alves ha dado una nueva dimensión al equipo), el objetivo es fortalecer la defensa acudiendo a la vía del low cost: jugadores que acaban contrato.

Andreas Christensen, el central danés del Chelsea (25 años), encaja en ese perfil sobre el que trabaja el Barça junto al de César Azpilicueta (32), capitán del equipo londinense, al igual que también trama la contratación de Noussair Mazraoui (24), el lateral derecho marroquí del Ajax, representado por Mino Raiola, el mismo que tutela la carrera deportiva de Erling Haaland (21). Los tres defensas tienen en común que quedan libres el 30 de junio. El delantero noruego, no.

El Barça tiene prácticamente cerrado el fichaje de Andreas Christensen

Toca reorganizar esa zona donde solo uno de los cuatro titulares está por debajo de los 30 años. Es Ronald Araujo. Tiene 22 años y está destinado a ser uno de los jefes de la retaguardia (ya lo es), pendiente como está de concretar su renovación porque acaba contrato en el 2023 y es objeto de deseo de los grandes clubs europeos, especialmente en la Premier League.

Piqué, con 35, es dueño de su destino y ha dejado dicho que seguirá si se ve como titular, pese a tener contrato hasta el 2024, Alves (38) debe seguir en el Barça para ir al Mundial de Catar con Brasil y Jordi Alba (32) completan esa zaga preferida por Xavi, que anda buscando jugadores de solvencia, con capacidad para tener rendimiento inmediato como ya ha ocurrido con los cuatro fichajes invernales

Viaje de Alemany y Jordi Cruyff a Londres

De ahí, el fichaje de Alemany, acompañado de Jordi Cruyff, miembro de la secretaría técnica del Barça, a Londres esta misma semana para ultimar las condiciones del acuerdo con Christensen (26 partidos con el Chelsea este curso, dos goles y una asistencias), una de las piezas más apetecibles para los equipos (el Bayern Múnich anda tras sus pasos) porque resume todo lo que busca en el Barça. Experiencia al más alto nivel, viene de la Premier, como sucedió con Adama, Auba y Ferran, y garantiza polivalencia y registros nuevos para Xavi.

Tras reformular el ataque este invierno, el Barça pone el foco en rejuvenecer y fortalecer la zaga

Reconstruir la defensa es esencial para el Barça, al igual que encontrar el delantero que abandere a esa nueva generación de futbolistas (Pedri, Gavi, Ansu, cuando se recupere, Nico…) que están protagonizando, ahora sí, la verdadera transición en el vestuario. Y en el campo. Haaland es la pieza que busca Laporta para activar el círculo virtuoso en su segunda etapa en el palco, aunque no será nada fácil.

Se enfrenta el presidente azulgrana al Manchester City, necesitado como anda Guardiola de un nueve que de aún más sentido a la enorme producción ofensiva que genera su equipo, y se enfrenta el Barça también al Madrid, quien no quiere dejar escapar a Mbappé y tampoco al noruego con lo que formaría un ataque temible. No solo por lo que representaría reunir a los dos sino porque dejaría en inferioridad de condiciones a sus rivales.

La búsqueda de un lateral zurdo

En invierno, el foco de Alemany y Jordi Cruyff estuvo arriba como demuestra que tres de los cuatro fichajes fueron delanteros: Aubameyang, Ferran y Adama. En el próximo verano la mirada se vuelca en la defensa porque hay jugadores que no entran en los planes de Xavi, a los que se debe buscar salida.

El club sigue buscando alternativa para la banda izquierda pero sin un coste excesivo

Umtiti, ahora lesionado, Lenglet, que ha pasado a ser uno de los últimos en la rotación del técnico, y Mingueza, más usado como lateral de emergencia que como central.

Falta, además, encontrar un recambio solvente para Jordi Alba. José Luis Gayà, el capitán del Valencia (26 años), sería el relevo perfecto, según el director de fútbo azulgrana, pero ese año de contrato de más que le vincula a Mestalla (acaba en el 2023), cierra sus opciones de venir al Camp Nou.

Ya lo intentó este mismo invierno con Nicolás Tagliafico, el lateral zurdo del Ajax, pero no logró traerlo. "El Barça era una oportunidad soñada, pero no me ayudaron", se quejó el argentino al frustrarse las conversaciones.

También sondeó el club azulgrana Alejandro Grimaldo (26 años), el exdefensa azulgrana que se instaló con éxito en el Benfica portugués al que llegó en el verano del 2016. Pero tanto Gayá como Grimaldo tienen el mismo problema. Les queda ese año más de contrato y no son los defensas a coste cero que necesita el Barça. Defensas con escasa inversión porque el club necesita acumular dinero para contratar el Haaland que necesita.