Así queda el Barça tras el mercado invernal: 10 delanteros y un solo lateral zurdo

Pasada la medianoche, mientras Mateu Alemany, director de fútbol del Barça, aún seguía en el despacho, Joan Laporta abandonaba la ciudad deportiva de Sant Joan Despí. Y desde la segunda planta, el presidente levantaba eufórico el puño derecho. En un par de ocasiones festejó el dirigente, acompañado por Rafa Yuste, el vicepresidente deportivo azulgrana, el cierre del mercado invernal donde han llegado cuatro jugadores (Alves, Ferran TorresAdama Traoré y Aubameyang) que delatan, de nuevo, el retrato de una plantilla absolutamente descompensada.

Hay 10 delanteros porque Dembélé, pese a que le han empujado para irse de todas las maneras legales posibles, no se ha movido del Camp Nou y solo un lateral izquierdo: Jordi Alba. Se han ido tres futbolistas: Demir al Rapid de Viena, Coutinho, cedido al Aston Villa e Iñaki Peña, también cedido al Galatasaray. Pero no ha llegado, en cambio, ningún especialista defensivo para la banda izquierda.

El 'caso Dembélé' sigue

A Xavi, pendiente de lo que ocurra con el díscolo francés, a quien no se descarta incluso que el club le conceda la carta de libertad, le toca gestionar esa abundancia de delanteros en estos próximos cinco meses con el único objetivo de colocarse entre los cuatro primeros de la Liga, el acceso a la Champions de la próxima temporada. Y de esos cuatro, solo podrán ser inscritos tres en la Europa League.

Tiene el técnico el delantero que quería (Aubameyang encaja en ese deseo), pero no ha llegado Morata, que era su preferido. No tiene, sin embargo, al lateral zurdo que de descanso a Alba, el único jugador que no tiene recambio en una plantilla que se ha quedado, de momento, con dos porteros (Ter Stegen y Neto) la cesión de Iñaki Peña al Galatasaray. Como tercera vía emerge ahora Arnau Tenas, el guardameta del Barça B.

En la defensa solo ha recibido Xavi el refuerzo de Alves, que se encontraba sin equipo cuando lo fichó el Barça. Nada más llegar, el brasileño, a sus 38 años, se ha instalado en la titularidad porque el técnico apenas cuenta con Mingueza, una de las opciones que empleaba Koeman en el flanco derecho de la zaga.

Seis centrales en nómina

Y a Dest lo ha usado casi más de extremo que de lateral. Hay nueve defensas en el vestuario, con exceso de centrales (Piqué, Araujo, Lenglet, Mingueza, Eric Garcia, lesionado, y Umtiti, también lesionado), con dos laterales diestros (Alves y Dest) y solo uno zurdo (Alba).

Nada nuevo ha llegado este invierno para el centro del campo porque la inyección de la cantera le vino de maravilla a Xavi, que cuenta con Busquets, Pedri, Sergi Roberto, lesionado, Frenkie de Jong, Nico, ya con ficha del primer equipo, Riqui Puig, que tiene, eso sí, un papel marginal, y Gavi, ya instalado en la titularidad aunque seguirá contando con ficha del filial hasta junio mientras se negocia su renovación. 

Posee Xavi 10 delanteros porque el objetivo principal de este mercado invernal ha sido reforzar el ataque. Tres de los cuatro fichajes (Ferran, Adama y Aubameyang) son para esa zona tan debilitada en eficacia, pero no en número.

La Premier, el nuevo caladero del Barça

Los tres, además, proceden de la Premier, convertida ahora en el caladero en el que pesca el Barça recientemente como ya se demostró cuando acudió a Manchester para reclutar al Kun Agüero, que se tuvo que retirar por problemas cardíacos, y Eric García. 

En esa amplia lista de 10 delanteros hay hasta siete con capacidad para jugar de 'nueve'

10 delanteros y hasta siete con capacidad para ejercer de delantero centro: Luuk de Jong, Braithwaite y Jutglà quedan ahora como soluciones secundarias al igual porque Aubameyang, Ferran Torres y Memphis podrían ejercer ese rol en el eje ofensivo del equipo, a la espera, claro, de que Ansu Fati se recupere de su grave lesión muscular.

Hay, además, tres extremos puros: Dembélé, si es que vuelve a tener algún minuto vestido de azulgrana, Adama Traoré y Abde, cuya progresión en el primer equipo puede quedar ahora frenada con la llegada de tantos delanteros.

Y como ya advirtió Xavi, el Barça, atrapado por la crisis económica, tiene lo que puede, no lo que quería.

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