EL RELEVO DEL KUN

El Barça, ante el delicado dilema de cubrir la baja de Agüero

Los problemas de tesorería, el ‘fair play’ económico, los precedentes de Braithwaite y Luuk de Jong y la opinión del nuevo técnico condicionan la contratación de un nuevo punta.

El Kun Agüero en un partido con el Barcelona

El Kun Agüero en un partido con el Barcelona

Joan Domènech
Roger Pascual
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El corazón de Sergio Agüero tuvo en vilo al Barça después de la arritmia que sufrió contra el Alavés. Tras informar el lunes que el punta argentino se había sometido a «un procedimiento diagnóstico y terapéutico», ahora el club deberá trabajar para ver cómo gestiona una baja que será, como mínimo, hasta el mes de febrero pero que podría alargarse más allá.

La plaga de lesiones que asola el Camp Nou se ha cebado especialmente con la delantera barcelonista. Además de los traspasos de Griezmann y Messi, los problemas físicos han martirizado a Agüero, Braithwaite, Dembélé y Ansu Fati. Memphis Depay, Luuk de Jong y Yusuf Demir han sido los únicos delanteros que han evitado pasar por una enfermería sobresaturada en este inicio de curso. Además de Agüero, el Barça tampoco podrá contar con Martin Braithwaite hasta el año que viene, después de haber sido operado de la rodilla izquierda el 16 de septiembre.

Opción truncada tras Martin

La última vez que el Barça fichó fuera del mercado de verano fue precisamente cuando contrató al delantero danés. Ya se había cerrado el mercado de invierno de 2020 cuando Dembélé cayó de nuevo lesionado. El Barça, apelando a la regla que permitía fichar si había un lesionado de larga duración (más de cinco meses), pagó los 18 millones de cláusula de Braithwaite al Leganés. El club madrileño cargó contra esta norma, que solo se aplicaba en España. Sin embargo, no se cumple el primer precepto para poder hacer un fichaje: la baja de Agüero es para tres meses.

Kun, tras sufrir su problema físico en el Camp Nou durante el Barça-Alavés.

Kun, tras sufrir su problema físico en el Camp Nou durante el Barça-Alavés. / Jordi Cotrina

La mala experiencia de Braithwaite, último fichaje invernal y cuyo rendimiento no ha sido el esperado, se une al del último fichaje del mercado de verano. Sobre la bocina, y ante la necesidad de atar a un delantero después de haber perdido a Messi y Griezmann, la secretaría técnica acabó firmando a Luuk de Jong. Las prestaciones del expupilo de Koeman, que le recomendó, han sido todavía más decepcionantes que las de Braithwaite. Los movimientos del club, además, están limitados por las restricciones económicas.

Koeman da instrucciones a Luuk de Jong en su primer entrenamiento con el Barça.

Koeman da instrucciones a Luuk de Jong en su primer entrenamiento con el Barça. / FCBARCELONA

Reverter afirmó que habría 20 millones en caja para poder fichar en enero

Ferran Reverter explicó en la presentación de la due dilligence que el equipo tenía 20 millones para poder fichar en enero. Aunque hay que tener en cuenta que el club tendrá que hacer frente al despido de Koeman y a la contratación de Xavi. Los posibles refuerzos deberían contar también con el visto bueno del nuevo técnico. Será Xavi quien decida qué perfil de futbolista desea ante la posibilidad de fichar en enero.

Habría que ver si la faja de la masa salarial permitiría acometer una nueva contratación. José Guerra, director general corporativo de LaLiga, explicó hace un mes que podría ampliar ese límite en un 4% adicional para despedir a Koeman y contratar a un nuevo entrenador, en aplicación del artículo 74 de la normativa del control económico. No obstante, el coste del finiquito contaría en esta campaña y el posible ahorro del salario del entrenador despedido no afectaría a no ser que sea una salida acordada con el técnico. Xavi, si finalmente se confirma como relevo.

Raheem Sterling y Pep Guardiola, en un partido de Copa.

Raheem Sterling y Pep Guardiola, en un partido de Copa. / Darren Staples / Reuters

Sterling, el más sonado

El nombre que más ha sonado desde agosto es el de Sterling, extremo del Manchester City que se plantea salir ante la falta de minutos. Su llegada en enero siempre estaba condicionada a que pudiera ser en forma de cesión y vinculada a la posibilidad de que Dembélé, que acaba contrato en junio, no renueve. Pero ahora, ante la posibilidad de que la baja de Agüero se alargue, podría ganar enteros.