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"LA RENOVACIÓN DE MESSI VA BIEN"

Laporta: "En el Barça, ahora, perder tiene consecuencias"

El presidente dice que no descarta la continuidad de Koeman, aunque le ha asegurado que le busca sustituto

Afirma que en la auditoría están "saliendo cosas que son preocupantes" y pedirá "responsabilidades" a la junta de Bartomeu

Joan Laporta, en rueda de prensa

Joan Laporta, en rueda de prensa / JORDI COTRINA

Joan Domènech
Roger Pascual
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Joan Laporta pide a los socios paciencia y optimismo. Lleva dos meses y medio dirigiendo de nuevo al club, y durante este tiempo trata de hacer compatible dos realidades: la liquidación del proyecto de Josep Maria Bartomeu y la construcción de su modelo de club. Y, además, con la limitada gestión que permite la grave situación económica heredada.

Esta representación del club se resume en la figura de Ronald Koeman. Es el entrenador fichado por Bartomeu –“tú no eres mi entrenador preferido, dame tiempo para buscar un sustituto y si no lo encuentro, seguirás”, le espetó Laporta al técnico holandés en la última reunión, algo que no negó el dirigente- y que a Laporta no acaba de gustarle, con el añadido de que tiene un año más de contrato y debería pagarle una alta indemnización, que con la falta de dinero de la entidad agrava la situación.

“En el Barça, ahora, perder tiene consecuencias”, proclamó Laporta para exponer las diferencias que le separan del tono de Bartomeu, diferencias de la dimensión de un mundo y tan sustanciales que Lionel Messi valora continuar en el Barça cobrando mucho menos cuando hace menos de un año pedía marcharse a través de un burofax.

Laporta frente varios ejecutivos y directivos del club.

Laporta frente varios ejecutivos y directivos del club. / Jordi Cotrina

«A Leo le hemos hecho una oferta dentro de nuestras posibilidades. Seguro que merece más y podría ganar mucho más en otro club, pero valora el esfuerzo que hacemos"

"Desastroso final de temporada"

«Le hemos hecho una oferta dentro de nuestras posibilidades. Seguro que Leo merece más y podría ganar mucho más en otro club, pero valora el esfuerzo que hacemos y por sus ganas de hacer grande al Barça, creo que le hace mucha ilusión continuar», manifestó Laporta, que se confesó «moderadamente optimista» de que Messi, acepte la renovación.

El futbolista, más que dinero, desea recibir “afecto, cariño, comprensión, sentirse a gusto”, y eso es lo que el presidente le está dando, a diferencia de Bartomeu. “Leo quiere un Barça en grande, competitivo, no el conformismo que veía”, añadió el dirigente sobre la exigencia que desea reimplantar, recordando que en el Barça no hay temporadas de transición para evitar un "desastroso final de temporada", como el que se ha producido.

Laporta gesticula durante una de sus respuestas.

Laporta gesticula durante una de sus respuestas. / Jordi Cotrina

"Con Ronald estamos en una fase de reflexión para compartir objetivos y unificar criterios. Ha habido momentos que no me han gustado y momentos en los que hemos disfrutado"

La masa salarial asciende al 110% de los ingresos, lo que obliga a una reducción drástica de los sueldos

Periodo de reflexión

Es un motivo por el que, vino a decir el presidente, Koeman esté en la cuerda floja. De momento están en "una fase de reflexión para compartir objetivos y unificar criterios", eufemismo por el que Laporta le busca un relevo. "Ha habido momentos que no me han gustado y momentos en los que hemos disfrutado. Esta contradicción permanente es lo que nos servirá para tomar decisiones", afirmó Laporta, que se siente cargado de razones para despedirle. No lo hace, sin un candidato a la sucesión y sin dinero para el finiquito. "No descartéis a Koeman", apuntó.

El entrenador no es el único culpable ni el único que pagará las consecuencias de los resultados. También los jugadores por «ciertas actitudes, como que no pasa nada si se pierde», y por una cuestión económica. La masa salarial asciende al 110% de los actuales ingresos, lo que obliga a una reducción drástica de los sueldos. Koeman, de momento sigue, pero otros casos heredados se han liquidado.

Laporta sonríe tras una de sus respuestas.

Laporta sonríe tras una de sus respuestas. / Jordi Cotrina

El de Xavi Pascual, por ejemplo. Laporta no asumía la obligada renovación del contrato si el equipo de balonmano conquista la Champions. Además, la antigüedad del técnico y "razones técnico-deportivas" alentaban la sustitución. Ocupará su cargo Antonio Carlos Ortega, adelantó Laporta como noticia. El relevo de Andreu Plaza, al frente del fútbol sala, es un caso semejante. Reclamó el presidente el privilegio de imprimir el sello en su particular modelo de club. Tan distinto al de Bartomeu.

Responsabilidades en la economía

Laporta calcula que el Barça tendrá que jugar en Montjuïc unos 8 meses

Laporta afirmó que le pedirá "responsabilidades" si cuando termine la auditoría, se encuentran acciones "sorprendentes y preocupantes" como las que han detectado y que han contribuido a crear la deuda. Como que el Barça haya pagado 1,5 millones al Club Laietà por las obras del Espai Barça.

El proyecto ha quedado obsoleto y se han gestionado con el Ayuntamiento algunas variaciones. Sí confirmó que "el equipo tendrá que jugar en Montjuïc 8 meses", calculó, cuando se instale la visera encima de las gradas.

"Le dije a Ceferin que no pediremos perdón por pensar ni pagaremos una sanción sin justificación"

El club ha programado para el 20 de junio. La asamblea es, precisamente, el órgano que debería aprobar la inscripción del Barça en la Superliga. No se va votar el proyecto fallido, pero al que no renuncia el Barça: "Le dije a Ceferin [el presidente de la UEFA] que no pediremos perdón por pensar ni pagaremos una sanción sin justificación". Ahora queda una compañía con derechos que se los ha atribuido un juzgado que lo ha mandado a uno de Luxemburgo para que ratifique ese derecho a la competencia», explicó.

El Barça y Laporta entienden que el fútbol está sumido en una grave crisis por la pérdida de audiencia de las nuevas generaciones. Los clubs grandes sufren déficits en las cuentas de explotación y esa crisis se alargará en una cadena hacia las entidades menos potentes. Se salvarán, solo, vaticinaba, el dirigente, los clubs-estado, que son los interesados en que el sistema siga igual, sin cambiar: "Ellos tienen una fácil solución: llaman y dicen: 'envíame tanto'.

Laporta frente varios ejecutivos y directivos del club.

Laporta frente varios ejecutivos y directivos del club. / Jordi Cotrina

Así hemos seguido en directo la comparecencia.