Combate en Hong Kong por el 'Barçagate': "No es agua clara"

Antes de que estallara el escándalo del Barçagate, hubo un combate entre el CEO del club, Òscar Grau, y Xavier Asensi, Managing Director de la zona de Asia y Pacífico. Después de haber firmado dos contratos de la filial azulgrana de Hong Kong con Coyote y Big Data (dos de las empresas de Nicestream-I3 Ventures), Asensi le plantó cara al exbalonmanista.

"Cada día que pasa tengo más claro que si hubiera leído los contratos no los habría firmado. La prueba está en que me negué a firmar el tercero.", le decía en un duro correo electrónico a Grau. "Si se acabara haciendo el pago desde Hong Kong podría haber serios problemas legales para mí (y para ti Oscar). Yo no me haré responsable del pago de 230.000 euros a unas empresas en parajes remotos que no sé quienes son, ni que hacen ni por qué se han contratado".

"Òscar, cuanto más pienso en esto y mas leo lo que hacen estas empresas, más claro tengo que esto no es agua clara. Te pido que me quites de responsabilidad legal en estos dos contratos". En su declaración ante los Mossos, Asensi explica que habló con su jefe, Francisco Calvo, que le dijo que el contrato tenía "muy mala pinta". No se hizo ningún pago desde Hong Kong y se redirigieron pagos desde otras áreas.

Caso paradigmático

El sumario del Barçagate refleja que el club pagó casi 45.000 euros en una factura sin contrato por un trabajo de mejora de la reputación de Teresa Basilio. Nombrada miembro de la junta directiva en 2018, finalmente no pudo ser ratificada ya que no contaba con cinco años de antigüedad como socia del club, por lo que al día siguiente de su nombramiento se señalaba que sería solo asesora en materia de cultura del club. Se contrató verbalmente con Nicestream un trabajo de SEO para que hubiera informaciones neutras en las búsquedas de Google, pese a que la "minipolémica", como la califican los Mossos, sigue estando presente en las primeras búsquedas. El informe policial considera que este caso sería paradigmático de los trabajos de Nicestream. "Como en el de Teresa Basilio la utilidad de muchos informes y trabajos entregados por Nicestream es dudosa y parecen dirigidos a un interés particular de algunos de los directivos".

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