Cinco años deprimentes

Las seis hecatombes seguidas del Barça

Repaso a las goleadas encajadas por el club azulgrana en un lustro de declive

Messi mira a Mbappé.

Messi mira a Mbappé. / Lluís Gené / Afp

Joan Domènech

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El Barça lleva cinco temporadas despidiéndose de Europa de mala manera, encajando goleadas impropias de un grande de Europa. Lo es, pero ha venido a menos en un declive que no se ha detenido. Sin que haya terminado la eliminatoria con el Paris Saint Germain tras el 1-4 de la ida, la situación actual del equipo de Ronald Koeman y su nivel comparado con el de Mauricio Pochettino, no invita a contemplar la posibilidad de una remontada, como sucedió en la primera de las seis hecatombes consecutivas. El Barça está en un túnel del que aún no ha salido.

2016-17. PSG-Barça, 4-0

Ida de los octavos de final. La goleada del Parque de los Príncipes, forjada con dos goles de Di María, uno de Draxler y otro de Cavani, se levantó con el apoteósico 6-1 del partido de vuelta. El Barça había acudido confiado a la cita frente a un rival que iba coleccionando nombres a golpe de talonario, pero que no era nadie en la Champions. El tridente (Messi, Suárez, Neymar) solo conectó un tiro entre los tres palos del marco francés. Había signos ya de erosión y se había perdido ante el Manchester City (3-1) en la fase de grupos. Fue el primer aviso de lo que vendría.

Neymar, rodeado de Marquinhos, Di María y Verratti.

Neymar, rodeado de Marquinhos, Di María y Verratti. / Etienne Laurent / Efe

2016-17. Juventus-Barça, 3-0

Ida de los cuartos de final. El sorteo deparó el emparejamiento ante el coloso italiano. Luis Enrique removió la alineación y el dibujo, dejando la defensa con tres centrales (sentó a Jordi Alba en el banquillo) y reforzando el centro del campo. Paulo Dybala sembró el desconcierto en un Barça poco acostumbrado al dispositivo y colocó un rápido 2-0 en el marcador. Chiellini cabeceó el tercero en pugna con Mascherano. No hubo un segundo milagro. El tridente no inquietó a Buffon (0-0). Ni siquiera marcó un gol que pudiera alimentar otra gesta.

Alves consuela a Neymar en presencia de un sonriente Neto, entonces en la Juventus.

Alves consuela a Neymar en presencia de un sonriente Neto, entonces en la Juventus. / Jordi Cotrina

2017-18. Roma-Barça, 3-0

Vuelta de los cuartos de final. El Barça de Ernesto Valverde acude con el 4-1 de la ida. Dos fueron autogoles italianos. El entrenador alerta de la importancia de evitar un gol prematuro en cada una de las partes para evitar que el cuadro romanista se anime y crea en poder levantar un marcador. Pues encajó un gol en el minuto 6 del primer tiempo y el segundo en el 13 del segundo tiempo en un penalti absurdo de Piqué. Un cabezazo de Manolas a ocho minutos del final castiga a un Barça especulativo, más dispuesto a que no sucediera nada. Pero había sucedido: la noche anterior Ineista había comunicado a sus compañeros que se marchaba.

Messi contempla la alegría de Florenzi.

Messi contempla la alegría de Florenzi. / Alessandro Bianchi / Reuters

2018-19. Liverpool-Barça, 4-0

Vuelta de la semifinal. Lo que estaba por llegar en Anfield rozó el rizo. El Barça viaja con un 3-0 de la ida, bastante engañoso, gracias a los goles de Suárez y dos de Messi (el 600 de su carrera, de una espectacular falta) y las paradas de Ter Stegen. La visita a Liverpool se salda con un descalabro descomunal. El equipo iba camino de la final de Madrid y del triplete y luego perdió la final de Copa. Mané marcó en el primer tiempo, y los azulgranas pudieron empatar, pero en el comienzo del segundo tiempo encajaron dos goles de Wijnaldum. El cuarto llegó en un córner grotesco que dio la vuelta al mundo.

Ter Stegen recoge el balón del fondo de la red delante de Wijnaldum.

Ter Stegen recoge el balón del fondo de la red delante de Wijnaldum. / Phil Noble / Reuters

2019-20. Barça-Bayern Múnich, 2-8

Cuartos de final. La vergüenza de todas las vergüenzas. El resultado más humillante de la historia. La pandemia para el fútbol de marzo a agosto, y el Barça viaja a Lisboa tras haber eliminado al Nápoles en casa. El duelo será a partido único. El once de Quique Setién, medio descompuesto, va a medirse con un Bayern invicto. El cuadro alemán es una apisonadora que no tiene piedad. El colmo es que Coutinho, cedido y suplente en el club bávaro, anota los dos últimos tantos. El resultado que luego lo desencadena todo: el despido de Setién, el burofax de Messi, el fichaje de Koeman...

Lewandowski anota uno de los ocho goles del Bayern en Lisboa.

Lewandowski anota uno de los ocho goles del Bayern en Lisboa. / Manu Fernández / Afp

2020-21. Barça-PSG, 1-4

Ida de los octavos de final. Siete meses después de la masacre de Múnich, el Barça vuelve a afrontar una eliminatoria ante el PSG. La plantilla se ha rejuvenecido tras los despidos de Vidal, Rakitic y Suárez y las llegadas de Pedri, Trincâo y Dest y la de Pedri. La Juventus, en el último partido de la fase de grupos, levanta el golaveraje de la brillante victoria de Turín (0-2) con un 0-3 (dos goles de penalti de Cristiano) que obligará a jugar al vuelta fuera de casa. Un mal que carece de importancia tras el 1-4 del martes. El nuevo PSG de Kylian Mbappé, pese a las ausencias de Neymar y Di María, aplasta al decadente Barça de Messi.

Mbappé y Griezmann, en una jugada del martes en el Camp Nou.

Mbappé y Griezmann, en una jugada del martes en el Camp Nou. / Lluís Gené / Afp