El mercado de invierno del Barça: de Coutinho a cero

Ni tres millones tiene el Barça para hacer un fichaje de invierno. Ni tres millones ha querido gastarse el club para cubrir la necesidad expresada por Ronald Koeman de tener un futbolista más. Ni tres millones desea asumir nadie –ni el presidente de la Gestora ni dos de los tres candidatos a la presidencia- visto el erial que ha dejado Josep Maria Bartomeu en el club.

El cero gasto, cero fichajes, del Barça en este mercado de invierno revela la situación de pobreza extrema a la que ha llegado la entidad, acosada por una deuda de 1.173 millones de euros, que ni tan siquiera ha podido contratar a Eric Garcia, un joven defensa canterano (del Barça, no del Manchester City, que se lo llevó en el 2017) de 20 años que sería el sexto central, aunque en la jerarquía de Koeman pasaría a ser uno de los dos titulares. O no. El nombre de Memphis Depay, el delantero que quería el técnico, hace tiempo que desapareció.

Millones tirados

Los tiempos de la opulencia quedaron atrás por los millones que derrocharon Bartomeu y su junta. Billetes tirados en la cuneta (120 más 40 se pagaron por Philippe Coutinho en el mismo 2017) que habrían permitido adelantar la incorporación de Garcia cuatro meses, de junio a febrero, si hubiera en caja tres millones de euros (más siete en variables).

El plazo aplazado no ha sido el reclamo para contratar a Eric Garcia, que sería el sexto central de la plantilla

Tampoco seduce el caramelito del pago aplazado de otro dispendio aparentemente superfluo –necesario para eliminar al PSG, según Víctor Font- para que Carles Tusquets, el presidente de la Gestora, se atreva a acometer la operación. Su antecesor en el 2015 Ramon Adell, comprometió sin remilgos 34 más 7 por Arda Turan y 18 más 4 por Aleix Vidal.

Tal vez influya también la aparente redundancia de fichar a Eric Garcia cuando en la plantilla están Piqué, Araujo, Lenglet y Umtiti, más Mingueza, reconvertido por unos días de lateral derecho, para proteger la portería de Ter Stegen, y los precedentes de los fichajes invernales, a cada cual más inútil. Inefectivo, perdón.

La disculpa de Koeman

La tendencia del Barça en los fichajes de invierno certifica la vertiente manirrota de Bartomeu, quien desde el 2017 acudió ininterrumpidamente al mercado navideño. Ronald Koeman, el portavoz del Barça, lanzó otro capotazo al exdirigente, disculpándole. "Con el covid-19, todos los clubs tienen muchos problemas. Si miras a los grandes de Europa, hay muy pocos que hayan gastado dinero". Apenas alcanza los 20 millones entre todos. Martin Braithwaite, el año pasado, costó 18.

"Con el covid-19, todos los clubs tienen muchos problemas. Si miras a los grandes de Europa, hay muy pocos que hayan gastado dinero"

— Ronald Koeman, entrenador del Barça

Puntuales, por urgentes, habían sido las compras del Barça a media temporada. Ibrahim Afellay era la última (2011), hasta la llegada del último expresidente, para una plantilla de cuatro delanteros. Le antecedió José Manuel Pinto, en el 2007, después de que Albert Jorquera se rompiera los ligamentos cruzados de la rodilla. Y antes, también con Joan Laporta, se ficharon a Demetrio Albertini y Maxi López en la temporada 04-05, donde hubo cuatro roturas de ligamentos cruzados: los de Motta, Gabri, Edmilson y Henrik Larsson, uno de los ayudantes de Koeman.

Yerry Mina ha sido la única compra fructífera. Costó 11,8 millones en invierno y fue traspasado por 30,2 en verano

Del verano al invierno

Pero en el 2017, y con la cartera llena con los millones depositados por Neymar, y el orgullo herido por la primera negativa del Liverpool en verano, Bartomeu firmó la hipoteca de Coutinho. Ya había pagado la de Ousmane Dembélé (105 más 40 en variables), y el francés había iniciado su cadena de lesiones musculares. Igual que Arda. Rafinha seguía roto. Como se iba Javier Mascherano, desde el Palmeiras llegó Yerri Mina a cambio de 11,8 millones. Inversión fructífera porque el gran Mundial que hizo con Colombia permitió cobrar 30 millones del Everton.

Todibo, fichado del Toulouse en el 2019, acaba de ser cedido por tercera vez: Schalke, Benfica y Niza

En diciembre del 2018 hubo más fichajes invernales. Tres. Pero el gasto se redujo brutalmente. La caja estaba vacía. Jeison Murillo fue cedido por el Valencia (1,2 millones), Kevin Prince Boateng lo prestó el Sassuolo (1) y Jean-Clair Todibo fue adquirido al Toulouse (1 millón más dos en variables). Umtiti y Vermaelen estaban siempre en la enfermería y Alcácer y Munir fueron traspasados, cansados de estar a la sombra de Luis Suárez. Murillo y Boateng solo jugaron cuatro partidos de enero a junio, y Todibo, dos. El francés ha sido cedido por tercera vez. Después de pasar por el Schalke y el Benfica, va al Niza.

Y en el invierno pasado, se gestaron bajas con Ernesto Valverde y se acometieron fichajes con Quique Setién. El Barça cedió a Todibo, Wague, Rafinha y Aleñá y Dembélé estaba de baja. Bartomeu retrasó los refuerzos hasta que no se rompió Luis Suárez al volver de la Supercopa. Entonces, el presidente, agobiado por las urgencias, fichó un delantero para el B (Rey Manj, del Albacete, 2 millones) y uno para el A: el sustituto de Suárez fue Martin Braithwaite, por quien se pagaron 18 millones al Leganés.