Las elecciones azulgranas, en alerta roja

Los crecientes nubarrones de aplazamiento electoral se ciernen tanto sobre las elecciones del Barça como las catalanas. El lunes Salut señalaba que el pico de contagios de la tercera ola del covid llegaría el 20 de enero, solo cuatro días antes de los comicios azulgranas. El viernes el Barça y el Govern se reunirán para decidir si se mantiene la cita de los culés con las urnas. A nadie se le escapa que aplazarla sería también la antesala de la suspensión de las del Parlament, prolongando así la interinidad de Carles Tusquets y Pere Aragonès. Joan Laporta, tras golear en las firmas, no quiere oír hablar de aplazamiento, mientras que Víctor Font, Emili Rousaud y Toni Freixa son partidario de posponerlas si no se puede garantizar el derecho de participación de todos los socios y la seguridad sanitaria.

Laporta ha insistido en que no hay "razones objetivas" que aconsejen no celebrar las elecciones azulgranas, los mismos términos con los que el Govern defendía que en noviembre se podía votar la moción de censura. En este sentido y consciente de que hay movimientos para postergar aún más la votación, Laporta ha pedido que "el barcelonismo se movilice y que no haya ninguna intromisión para suspender estas elecciones". El exdiputado catalán, que tiene la experiencia de haberse presentado a unas elecciones al Barça y al Parlament, señala que "no tienen nada que ver, son dos universos diferentes. Uno en el que votan unas 50.000 personas y uno con 5 millones con derecho a voto".

Reunión de urgencia con Tusquets

"Tenemos que hacer todo lo necesario para que se celebren. No hay ninguna razón para que no se celebren", ha insistido, incidiendo en los perjuicios que supondría para el club, como dejar escapar la ventana del mercado de invierno y postergar el plan de choque económico. "La suspensión de las elecciones perjudicaría enormemente al club. Si nos vamos a un aplazamiento, nos iríamos a mayo o junio; no podemos perder todo ese tiempo. Tendría unas consecuencias irreversibles. Ya basta de jugar con estas cuestiones. El Barça no puede aguantar más", relató antes de pedir por escrito una reunión de urgencia con Tusquets.

El confinamiento municipal a día de hoy vigente impediría, por ejemplo, que los vecinos de L'Hospitalet pudieran cruzar la calle Riera Blanca para ir al Camp Nou. El candidato cree que "un país que adopta medidas y excepciones para ir a trabajar tiene que adoptar excepciones para que se puede ir a votar". En este sentido cree que con un certificado de autorresponsabilidad y el carnet de socio debería bastar para poderse desplazar a los 10 puntos de votación fijados por el club.

Font emplaza a Carles Tusquets a que “implemente” todas las medidas necesarias que permitan una votación legitimada y legitimable en unas circunstancias extraordinaria como habilitar el voto por correo, el voto electrónico o la ampliación de los horarios y las sedes de votación. “El club necesita con urgencia que haya una nueva junta y un nuevo presidente, pero los derechos de los socios son más importantes”, subrayó Font. El candidato lanzó un dardo a Laporta con su firme postura a que se mantenga la votación del día 24 y no se aplace. “Espero que alguien ponga los intereses del club por delante de los intereses personales”.

Por su parte, Freixa ha aseverado que apoyarán todas las medidas que las autoridades sanitarias decidan y también a lo que determine la junta. "Esto sí, siempre que aseguren, a nuestro entender, plenas garantías para que nuestros socios y socias, especialmente nuestros mayores, puedan votar sin ningún riesgo para su salud ". En la misma línea se ha posicionado Rousaud, acompañado del doctor Miquel Llobet, responsable médico de su candidatura. "Si se pone en riesgo una sola vida, volvemos a empezar desde cero", ha señalado el exdirectivo de Josep Maria Bartomeu, recordando que la edad media son 58 años, con mucha población de riesgo, por encima de los 70.