MES DECISIVO

Barça, curvas en enero

El equipo se juega 3 competiciones en un denso calendario, que podría hacerle jugar hasta 9 partidos desde este domingo hasta el día 31

Vuelve Messi en Huesca, ya recuperado de sus molestias en el tobillo

Los socios elegirán el 24 al nuevo presidente

El club vive instalado en la provisionalidad, sumergido en una grave crisis económica

Entrenamiento del fc barcelona del 02 01 2021 fotos fcb messi

Entrenamiento del fc barcelona del 02 01 2021 fotos fcb messi / Miguel Ruiz / FCB

Marcos López

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Enero decidirá el futuro del Barça. El futuro deportivo para el complejo proyecto de Koeman y, por supuesto, el futuro inmediato del club con la elección del nuevo presidente el próximo 24. El hombre que deberá pilotar la delicada reconstrucción de una institución que ha entrado en una imparable decadencia deportiva, acompañada de una terrible crisis económica, agravada, además, por la pandemia, pendiente también del futuro de Messi, que puede irse a donde quiera. Y gratis.

La visita al campo del Huesca, colista de la Liga, abre un sinuoso camino para los azulgranas

Curvas sin parar en un mes que arranca hoy con la visita al estadio del Alcoraz para medirse ante el Huesca, el colista de la Liga, y que tendrá después el paso por las urnas para depositar el voto que permita escoger al sucesor de Josep Maria Bartomeu, el dirigente que no supo sostener la excelencia deportiva después de que el tridente (Messi-Neymar-Suárez) le diera el triplete, con Luis Enrique en el banquillo, y las elecciones del 2015. Pero ni pudo agotar su mandato, claudicando con su dimisión tras la fuerza de un voto de censura que ni siquiera necesitó activarse para desalojarlo del palco.

Liga, Supercopa, Copa

No habrá día tranquilo para un club que vive instalado en la provisionalidad. Tanto en el campo, donde escruta cualquier detalle de Messi para saber si aún le queda algo de fe en el Barça, como fuera donde se avivará la campaña preelectoral, obsesionados como están los ocho aspirantes (Laporta, Font, Benedito, Freixa, Rousaud, Vilajoana, Farré y Fernández Alà) en superar la primera frontera de obtener las 2.257 firmas necesarias para convertirse ya oficialmente en candidatos.

Hay dos mundos cohabitando en este Barça que no ha superado el trauma de Lisboa. El de Koeman, que se enfrenta a un mes donde se juega la Liga (hay cinco jornadas en 28 días, tres solo en esta próxima semana), un título por disputar (la Supercopa de España) y otro torneo que asoma sin margen de error. Es la Copa del Rey, donde un fallo te envía a casa a la primera.

"Hay gente mentirosa. Pero yo soy una persona realista y no podemos decir que ganaremos la Liga. Pero eso no quiere decir que no vayamos a luchar por ganar", subrayó el técnico. En el otro mundo, está la carrera electoral, con promesas de nombres que son casi utópicos (Haaland, Mbappé) porque el club, como recordó Carles Tusquets, presidente de la Comisión Gestora del Barça, no tenía ni para pagar salarios por lo que tuvo que acordar con la plantilla diferir el importe de esos sueldos en los dos próximos años. Son 122 millones en retribuciones fijas y otros 50 millones más aproximadamente en bonus.

Messidependencia

De curva en curva viajarán esos dos Barças, supeditados al paso que vaya marcando Messi hasta el mes de junio, por mucho que Koeman aparente tener calma. O, al menos, lo intente. "No tenemos que estar nerviosos con el futuro de Messi. Él ya dijo que diría algo a final de temporada. Hay que respetar su decisión", argumentó el técnico, que recupera hoy a la estrella para jugar en El Alcoraz una vez superó las molestias que tenía en el tobillo. Por eso, causó baja ante el Eibar. "Lo veo bien, alegre, con ganas", sostuvo el entrenador, admitiendo, eso sí, una evidencia que no se puede ocultar a nadie.

"Sí, sí que hay un poco de Messidependencia. Pero es algo que ya hemos visto en estos últimos años. Veía que el equipo no jugaba bien y Leo luego lo resolvía. Por algo, es el número uno del mundo", afirmó el técnico. El problema es que ni teniendo al mejor le da para competir con Atlético ("no, no me arrepiento de haber dejado ir a Suárez", dijo Koeman) y Real Madrid. "No podemos perder un partido más si queremos luchar por la Liga", añadió el entrenador, la única voz que se escucha en el silencioso Camp Nou en los últimos y deprimentes meses.

Koeman sabe que debería "reforzar" la plantilla. Si no lo hace "es por un tema de dinero del club". Y avisa a los jugadores con los que no cuenta que se vayan buscando equipo este invierno. No dio nombres. No hacía falta porque hablaba, y sin citarlos, de Riqui Puig, Aleñá, Umtiti, Junior... "Tenemos un plan, pero es el nuevo presidente el que debe decidir", dijo el técnico. Aunque el único plan para sobrevivir es ganar al Huesca.