DUELO CON EL ATLÉTICO

Koeman saca el genio

Koeman, en la conferencia de prensa telemática que ofreció antes del duelo con el Atlético.

Koeman, en la conferencia de prensa telemática que ofreció antes del duelo con el Atlético. / periodico

Marcos López

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Alza la voz Ronald Koeman. Saca el genio con tal fiereza que sobresalta a un club que proyecta un encefalograma casi plano desde hace meses. No hay otra voz que se escuche en el Camp Nou, desértico por la pandemia y huérfano de líderes.

Por no haber, no hay ni presidente al mando. Ni tan siquiera están convocadas oficialmente las elecciones para elegir la persona que ocupe la silla que dejó vacía Bartomeu con su dimisión.

Al técnico, entretanto, le toca asumir todas las funciones que los demás han ido abandonado en un deterioro deportivo e institucional que ha llevado al Barça a una situación límite. Y no es ninguna exageración.

Ni rastro del equipo que dominaba el juego y llenaba el Museo de títulos. No hay, además,  ni un céntimo en la caja, con el panorama inmediata obligadas y necesarias rebajas salariales para la plantilla por valor de 192 millones porque la institución se asoma al precipicio económico.

Y el futuro de Messi, que ya se marchó en agosto, obligado a quedarse en contra de su voluntad se acerca peligrosamente al día -el próximo 1 de enero- en que ya nadie podrá decidir por él.

Se pone serio Koeman porque es el único que tiene, de momento, la autoridad moral para enarbolar la bandera de un equipo en plena, lenta y compleja reconstrucción, donde no hay día en que no salga un asunto polémico que sacuda la ya de por si dañada autoestima del vestuario.

Estreno en casa del Cholo

Además, sin margen para poder trabajar con sus jugadores (solo ha tenido un entrenamiento con el grupo en las dos últimas semanas), llega Koeman a la exigente prueba del Atlético, donde Simeone, pese a la ausencia de Luis Suárez por positivo, está levantando otro equipo competitivo.

Tanto que no ha perdido ni un solo partido esta Liga. Es tercero, con 17 puntos, por detrás de Real Sociedad (20) y Villarreal(19). Pero el conjunto del Cholo tiene dos partidos menos porque ha vuelto a edificar otra muralla defensiva en torno a Oblak, quien solo ha recibido dos tantos en todo el campeonato. Y, además, el nuevo Atlético de Joao Félix marca más que nunca, con sus 17 tantos en siete jornadas.

Ni 100 días

Simeone es el dueño del Atlético. El próximo 23 de diciembre cumplirá nueve años en el banquillo rojiblanco, transformado desde hace ya tiempo en el entrenador mejor pagado del mundo. Ni Guardiola, ni Klopp, ni Mourinho alcanzan su sueldo.

Koeman, en cambio, no lleva ni 100 días en un Barça, enfrentado a un club que se había ido autoengañando. Pensaba que con tener a Messi ya era más que suficiente. Sin saber que, en el fondo, a quien también le hacia mucho daño era al propio Messi, cuyas soluciones provisionales (las dos Ligas en los dos primeras temporadas con Valverde) iban, en realidad, tapando los profundos defectos estructurales de un club que entró en declive con la marcha de Neymar.

JORDI COTRINA

Más que un club el Barça es ahora un nido de problemas

Hace ya tres años que arrancó el desencuentro con el dimitido Bartomeu y comenzó la soledad deportiva del ‘10’, agravada este verano con la salida de Suárez camino de Madrid para convertirse en el nuevo y fiel soldado cholista. Messi se quedó en el páramo de Barcelona siendo, menuda contradicción, mucho más feliz ahora con la zamarra albiceleste que con la azulgrana.

Más que un club el Barça es ahora un nido de problemas. "Puedo entender que Leo esté cabreado", admitió Koeman. "Hay que respetar mucho más a gente como Leo", añadió después elevando el tono de su voz para proteger al jugador, cansado como está, según confesó él mismo, a su vuelta de Argentina, de ser "el problema de todo en el Barça".

Una mano tendida

Tras años y años siendo la solución, a veces la única, a tantas dificultades, Messi se siente desamparado. Justo ahora, cuando más lo necesita. Por eso, Koeman, el único que le ha dicho las cosas claras desde el primer día y mirándole a los ojos, algo que nadie se atrevía, le tiende la mano y salta cuando dudan de él.

Lo necesita Leo;lo necesitatambién Ronald.  "Messi debe estar aquí. Ojalá se quede. Pero yo no soy la persona que tiene que intentar que continúe", proclamó el técnico, aunque sí lo intenta, y con sus hechos, para que el 24 de enero, si es que finalmente se acude a las urnas, no sea demasiado tarde. Se enfada cuando "la prensa busca polémicas" porque él no ha detectado problema alguno en la relación del capitán con Griezmann.

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Lamenta Koeman que el Barça tenga menos descanso por los horarios de la LIga

"Son chorradas", llegó a decir el técnico recordando los comentarios del exagente del francés, a quien este abandonó "hace tres años". Como nadie habla en este club le toca a Koeman asumir todos los papeles de la obra. Es entrenador, por supuesto.

Pero también tutor de los jóvenes (pierde a Ansu Fati cuatro meses por lesión y sigue dando vuelo al prodigio de Pedri). Ejerce de portavoz de un club que por no tener no tiene ni voz. "Siempre jugamos fuera a las nueve de la noche, lo entiendo en un Atlético-Barça, pero en los demás partidos, no. Hay que ayudar a los futbolistas", dijo irritado porque su equipo juega el martes en Kiev.

Vuelve Coutinho

Sabía donde se metía. Y, por supuesto, lo que le esperaba. Trabajar con una plantilla desequilibrada -ni rastro del central que pedía, ni del nueveque necesita- pero no se queja de nada de eso.

Sí que saca el genio, en cambio, para defender a Messi, una vez dijo que se iba quedó más vulnerable y frágil que nunca, acunar a Griezmann y confiar en que Coutinho, ya recuperado de su lesión muscular, pueda darle este sábado el desequilibrio que requiere el Barça, a quien una derrota le dejaría a nueve puntos del Atlético. En otra situacion casi límite.

Mientras, Koeman debe ser técnico, tutor, portavoz, capataz y hasta psicólogo de un club que camina errático y desorientado.