EL ANÁLISIS TÁCTICO

Las claves tácticas del Barça-Ferencvaros: El retorno de los extremos

El equipo de Koeman golea en su debut europeo, aunque acabó jugando con 10 por la expulsión de Piqué

Ansu Fati y Trincao se felicitan tras el 2-0 al Ferencvaros.

Ansu Fati y Trincao se felicitan tras el 2-0 al Ferencvaros. / periodico

Marcos López

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1.- Messi ejerce de Messi y marca

Del Getafe al Ferencvaros cambió Koeman toda la estructura de ataque del Barça. Devolvió a Messi al centro del ataque. Pero eso no fue, sin embargo, lo más sustancial de esa decisión. Le rodeó de extremos. Trincao cabalgó por la derecha y Ansu Fati corrió por la izquierda.

El partido se puso áspero para el Barça cuando emergió el capitán con una jugada messiánica por la banda derecha, regateando a todo aquel que se le ponía por delante. Lo pararon. Pero haciendo penalti. Luego, marcó y el equipo se liberó. Leo, también. 

2.- Desajustes atrás y un par de sustos

No estuvo comprometido el Barça en defensa al inicio. Le costó entrar en el partido. Recibió un par de sustos, que le ejercieron de obligado despertador para un equipo adormecido. Ni siquiera el gol anulado a Nguen, que estaba en fuera de juego (m. 10), le hizo corregir ese error al conjunto de Koeman.

Después, el susto fue aún mayor porque la defensa, que era la misma de Getafe, no detectó la aparición por la banda derecha de Isael, que soltó un tiro impresionante que repelió el larguero. Entonces, Messi hizo la jugada de Messi. Luego, Piqué vio la tarjeta roja y no jugará en Turín.

3.- Ansu Fati marca; Ansu Fati asiste

Cuando el Barça estaba poco fiable en ataque, Messi ya conectó conAnsu Fati. El primer rasgo positivo en un equipo que empezó apagado. Pero luego la luz volvió a ponerla el joven delantero dejando dos jugadas realmente espectaculares.

La primera, que significaba el 2-0, nació de un pase extraordinario de Frenkie de Jong mientras Ansu atacaba el espacio, a la espalda de la defensa del Ferencvaros. Luego, definió con precisión. Y hasta cierta dulzura. Lo bello llegó después con el taconazo delicioso con el que asistió a Coutinho en su gol.