En Directo

BARÇA - GETAFE (2-1)

Golpes con goles

El acierto de Griezmann y Sergi Roberto permiten al Barça sobrevivir al asfixiante acoso del Getafe (2-1)

Antoine Griezmann celebra un gol esta temporada.

Antoine Griezmann celebra un gol esta temporada. / periodico

Joan Domènech

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

A la rudeza del Getafe opuso el Barça toda la sutileza que alberga en sus estrechas alforjas. Golpes con goles fue la respuesta azulgrana hacia su rival, un magnífico competidor que llegaba al Camp Nou crecido gracias a los buenos resultados (cuatro victorias consecutivas) y sin ningún complejo por una propuesta futbolística opuesta a la azulgrana.

Exigió el Getafe al Barça un sobreesfuerzo. En todos los sentidos, sobre todo psicológico. Le sometió a la tortura de estar los 90 minutos en tensión, sin permitirse ni un segundo de relajo, obligándole a reducir al mínimo cualquier error. Al leve descuido, ahí habría un rival para aprovecharse en ese duelo uno contra uno que planteó José Bordalás.

Asfixiado hasta el final

Asfixiado llegó al Barça al final del partido, reclamando la hora, sintiéndose expuesto con el 2-1 después de haber disfrutado de un buen rato con dos goles de renta. Bajó el pistón y lo pagó, porque el Getafe nunca desconectó. Gracias también a la anuencia del árbitro, que le toleró un sinfín de faltas. El Barça cometió 12 faltas y el Getafe llegó a las 30, casi doblando las 17 de promedio que tiene. Es el líder en infracciones. Los azulgranas vieron más tarjetas (3-2). Bordalás también fue amonestado y el médico madrileño vio la roja.   

En el cuerpo a cuerpo no había que hacer, como le dejó claro Nyom a Ansu Fati en el primer contacto, así que el Barça debió exprimir todo su talento imaginativo. A partir de posesiones largas quiso tomar el control del partido, discutido siempre por un Getafe que iniciaba su presión en los centrales azulgranas. Ter Stegen fue un magnífico y valioso desatascador para jugarse pases que a otros porteros les causaría una arritmia.

El toque de Ter Stegen

El toque de Ter Stegen no desentona en absoluto del de cualquier compañero de campo. Era el único lugar, el área del alemán, donde el Barça tenía superioridad numérica. En los orígenes, con los demás jugadores igualados. Hasta que no tuvo la paciencia de coser pases con cierta regularidad no se tranquilizó el Barça. Sucedió cuando habían transcurrido 20 minutos de partido. Antes hubo que adaptarse a las condiciones que impuso el Getafe, con un par de pérdidas graves, la lesión de Alba y el gol anulado a Nyom a través del VAR.

No habría otra salida que apropiarse del balón por más incómodo y desagradable que fuera, ya que el mero hecho de tenerlo implicaba estar en peligro: del error propio o del golpe ajeno. El carrusel de pases tranquilizó al Barça. Fue el medio para llegar al fin: los goles. Bellos ejemplos del estilo azulgrana para reivindicar un método propio para ganar partidos.

Inferioridad en el área

Sin embargo, la profusión de pases despertó pitos en la grada, que se removía inquieta al ver el balón más en el área de Ter Stegen que en la de Soria. El Barça se presentó muy esporádicamente y en situaciones de inferioridad numérica. Solo para marcar.

Dos magníficos tantos de precisa ingeniería técnica de la antigua fábrica barcelonista: sobre todo, el 1-0, con el pase de Messi a Griezmann. Había tres azulgranas contra cinco getafenses. El segundo nació de un avance por la derecha, que continuú en la izquierda y concluyó de nuevo a pies del precursor: Sergio Roberto.  

Conociendo a su viejo enemigo Bordalás, con quien no se saludó, Setién juntó a De Jong y Arthur con Busquets en el centro del campo y alineó a tres puntas, sin guardarse a ningún delantero en el banquillo. Bueno, en realidad, tenía al albanés Rei Manaj. Dentro de unos días tendrá a otro. Quién sabe si será Ángel, otro suplente, pero del Getafe. Reivindicó por sí mismo su candidatura: marcó el 2-1 y pudo anotar inmediatamente el 2-2. Ter Stegen, que por una vez empleó las manos, lo evitó.

Ese tanto recordó a los espectadores que el partido no estaba resuelto. Los jugadores del Barça lo sabían perfectamente porque seguían sintiendo el aliento en el cogote de sus rivales. Y no dejaron de notarlo hasta que volvieron a subir las escaleras del vestuario.

Barcelona, 2 - Getafe, 1

Barcelona: Ter Stegen (8); Sergi Roberto (6), Piqué (7), Umtiti (6), Alba (5); De Jong (6), Busquets (6), Arthur (6); Messi (6), Griezmann (6), Ansu Fati (6). Técnico: Quique Setién (6). Cambios: Junior (5) por Alba (m. 21); Rakitic (4) por Arthur (m. 74); Vidal (s. c.) por Ansu Fati (m. 84).