ANÁLISIS TÁCTICO

Las claves tácticas del Betis-Barça: Sobrevivir a una mala defensa

Messi regala tres asistencias de gol para superar una primera parte llena de desconcierto y problemas

Messi lanza un saque de esquina en el Benito Villamarín en el Betis-Barça.

Messi lanza un saque de esquina en el Benito Villamarín en el Betis-Barça. / periodico

Marcos López

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

1.- El rombo no dio consistencia defensiva

De nuevo, cambió de dibujo Setién. No jugó ni con una línea de tres centrales como en su debut ni tampoco con el 4-3-3, característico de Valverde. En Sevilla, el técnico cántabro empleó un traje nuevo refugiándose en el 4-4-2, dejando a Arturo Vidal en la punta de un rombo de cuatro centrocampistas, situando a Messi y Griezmann como los dos únicos delanteros.

No solo modificó notablemente el sistema sino que también introdujo novedades en todas las áreas estratégicas del equipo. Algunas obligadas. Umtiti ejerció de central diestro por la sanción de Piqué. Junior salió de titular en el lateral izquierdo, sentando a Alba, mientras Vidal y Griezmann recuperaban la titularidad.

Aunque ni con cuatro centrocampistas tuvo el Barça solvencia defensiva. No se había llegado a la media hora de partido y ya había encajado dos goles, víctima de tantos desajustes que Ter Stegen estaba vendido en cada acción ofensiva del Betis. Y cada balón perdido era una condena ante el caos azulgrana.

2.- Fekir sometió a una tortura a Semedo y Umtiti

Y, de pronto, Fekir disfrutó de la noche soñada en Sevilla. Escorado a la banda izquierda encontró su paraíso para sacudir al Barça en los dos primeros goles del Betis. En la jugada del penalti, trazó un cómodo eslalon de afuera hacia dentro, sin que Semedo o Umtiti se interpusieran en su camino hasta que su disparo topó con la mano izquierda de Lenglet. Penalti y 1-0 en contra para el Barça, que cometía errores en la salida del balón, especialmente el flanco derecho.

O sea, en la casa de Fekir, que sometía primero a Semedo y torturó luego a Umtiti. Ni con faltas le podían detener. En tres minutos, Sergi Roberto y Arturo Vidal vieron tarjeta amarilla en su estéril intento de frenarle. Y Fekir acabó luego siendo expulsado.

3.- Messi regaló tres asistencias de gol

No estuvo lúcido en el remate. Nada lúcido, porque Leo Messi disfrutó de tres buenas ocasiones para marcar. Topó en las tres siempre con Joel Robles, el portero del Betis, quien le supo cerrar todos los caminos. En la primera mitad, estuvo atento el meta achicando espacios cuando Messi controló el balón con la izquierda y remató con la derecha. Paró Robles.

Luego, en la segunda mitad, más de lo mismo. En este caso con dos disparos poco messiánicos porque iban a media altura. En ambos estuvo felino el guardameta del Betis. Pese a todo, no se desanimó el astro argentino. Y tuvo la posibilidad de regalar tres asistencias de gol. La primera fue una tradicional de Leo. No buscó a Jordi Alba, que estaba en el banquillo, sino a De Jong, quien invadió con acierto el área andaluza. Y justo en el tiempo añadido de la primera mitad sirvió la segunda asistencia con una falta frontal. Idéntico camino empleó en la tercera. No remató, asistió Leo.