La federación española anuncia que Ansu Fati ya es seleccionable

Todo va muy rápido en la vida de Ansu Fati. Extraordinariamente rápido tal si fuera un retrato de su descarado y refrescante fútbol, que ha iluminado al Barça. Corre feliz un joven de apenas 16 años por la pradera del Camp Nou al tiempo que los acontecimientos se precipitan a su alrededor, sin sentirse, eso sí, nada presionado. Ni tampoco asustado.

Juega con tanta naturalidad que igual no le da tiempo a procesar todo lo que ha vivido en los últimos 47 días desde que debutó ante el Betis. Ahora, la penúltima noticia de Ansu Fati es que ya puede jugar con la selección española.

Del anonimato a estrella del futuro

Ha pasado del anonimato (se sabía obviamente que era uno de los talentos más grandes de la cantera, renovado el pasado 24 de agosto con una cláusula anti fuga de 100 millones de euros), pero nadie podía imaginar -y menos él- que acabaría destrozando récords con la camiseta del Barça.

Ni podía intuir que obtendría la nacionalidad española por la vía exprés tras una reunión del Consejo de Ministros, temerosa como estaba la federación española escogiera jugar con la selección portuguesa. Era díficil de creer que Ansu, un delantero que ni tan siquiera había pisado el Mini o ahora el nuevo estadi Johan Cruyff porque no ha debutado con el Barça B, entrara por la puerta grande, avalado, además, por la figura paternal de Leo Messi.

De récord en récord

Tenía que estar jugando Ansu Fati en el Juvenil A azulgrana, pero, de pronto, derribó todos los obstáculos aprovechándose de la plaga de lesiones que sacudió a la delantera unido a la valentía de Valverde, quien detectó que se trataba de un niño con ángel.

Un niño que asombró en sus primeros minutos en el Camp Nou, convirtiéndose en el segundo jugador más joven que debutó en la Liga en  la historia del Barcelona. Un niño que apareció en El Sadar para firmar un gol que le llevaba directamente a los libros porque con 16 años y 304 días era el más joven en marcar.

No se detuvo ahí. Cada vez que pisaba un campo escribía una página para enmarcar como demostró luego contra el Valencia al ser el futbolista más joven en marcar un gol y dar también una asistencia. Tres días más tarde era el más joven en debutar en la Champions con la camiseta azulgrana y el tercero de toda la historia tras Babayaro y Tielemans, ambos jugadores  del Anderlecht.

"Ansu es un futbolista fantástico. Pero hay que ir poco a poco y sin presión" (Messi)

Deslumbraba en el campo, mientras en los despachos se activaban todas las gestiones para que el fútbol español no perdiera un talento de esa proyección. De ahí, su urgente nacionalización para que pudiera jugar con la seleccción española, consciente de que debía asegurar un talento así.

Tokio-2020, en el horizonte

Corría tanto su fútbol, descarado, imaginativo, atrevido, lleno de frescura, que hasta Messi tuvo que salir a pedir paciencia con Ansu Fati, a quien asesora su hermano Rodrigo. "Es un futbolista fantástico y tiene lo que hay que tener para triunfar. Pero si lo miro desde mis ojos... Me gustaría sacarlo gradualmente como hicieron conmigo cuando empecé. Llevando las cosas bien y fácil. Poco a poco y sin presión. No podemos olvidar que solo tiene 16 años", dijo Leo, preocupado por cuidar ese tesoro.

Tras conocerse el pasado miércoles que no sería convocado para el Mundial sub-17, la FIFA comunicó ayer a la federación española que "ya puede ser seleccionado por España en el momento que los técnicos lo estimen oportuno". Ansu apunta ya a la sub-21, con el horizonte olímpico de los Juegos de Tokio-2020, o incluso a la absoluta con Robert Moreno.