la liga de campeones de balonmano

El Barça de balonmano, a dos finales de su décima Champions

El conjunto de Xavi Pascual regresa a Colonia para disputar una 'final four' marcada por el pleno de técnicos españoles

Víctor Tomàs pone a prueba a Pérez de Vargas en un entrenamiento del Barça en Colonia.

Víctor Tomàs pone a prueba a Pérez de Vargas en un entrenamiento del Barça en Colonia. / periodico

Irati Vidal

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En un año en el que el barcelonismo pudo conquistar siete Copas de Europa, el balonmano se ha convertido en su última y única baza. Los de Xavi Pascual regresan a Colonia en busca de la décima Liga de Campeones de la sección y lo hacen como auténticos reyes de Europa. Y es que, desde que se disputa este formato de competición, los azulgranas solo han faltado tres veces a la 'final four', han ganado dos títulos y han disputado otras dos finales. Además, no hay nadie en el continente que disponga de tantas Champions en sus vitrinas.

Pero si algo ha enseñado la Liga de Campeones al Barcelona es que en Europa no hay favoritismos que valgan. Mucho menos cuando te juegas un título en dos partidos. Por eso, Xavi Pascual asegura que contra el Vardar, su primer rival en el Lanxess Arena  (sábado, 18.00 horas. Esport3) van a ir "a muerte, con todo lo que haga falta". Y lo necesitarán, pues no hay equipo más fuerte psicológicamente que el verdugo de los catalanes en la última 'final four' que disputaron.

Los macedonios, campeones de Europa en el 2017, se caracterizan por ser un equipo defensivamente muy potente y con un 6-0  bien estructurado. Pero si algo destaca del conjunto de Raúl García Parrondo es su capacidad para superar adversidades. Inmersos en un conflicto financiero con el club por constantes impagos y retrasos, los jugadores se lo han dejado todo en el 40x20 y han logrado clasificarse para su tercera 'final four' consecutiva.

“Este año toca”

Más allá del rival, el Barcelona tiene claro que la clave para conquistar Europa está en ser fiel a su estilo, aquel que nació del batacazo ante el Montpellier en los octavos de final de la Champions League pasada. No llegar a Colonia dolió pero abrió un nuevo camino. El club rejuveneció la plantilla, decidió no renovar el contrato a vacas sagradas como Viran Morros e inició una revolución en su estilo.

Desde entonces, los azulgranas se han convertido en un referente por su juego al contragolpe. Defienden fuerte, corren, no pierden tiempo en las transiciones y establecen un ritmo muy alto a los partidos. Y eso es lo que van a hacer en Colonia. "Hemos llegado con un balonmano muy vistoso, que está gustando mucho, y no lo vamos a cambiar", asegura Aitor Ariño, que recuerda que "como dijo Pascual, este año toca, este año sí".

Les toca a los de siempre, pero también a los nuevos, que serán muchos. Porque esta 'final four' será la primera para siete azulgranas. Möller, Petrus, Dolenec, Duarte, Ilic, Aleix Gómez y Andersson se estrenan en la fiesta  del balonmano europeo con un equipo que aspita a todo. Un equipo que busca repetir el 7 de 7 en títulos que logró el 2015, cuando conquistó su última Liga de Campeones. Enfrente, Vardar, Kielce, y Veszprém, tres de los equipos que le acompañaron a inicios de la temporada en el llamado ‘grupo de la muerte’.

Pleno español en los banquillos

Gane quien gane la Champions, el campeón de Europa hablará español, al menos en el banquillo. Y es que, por primera vez en la historia, los técnicos de los cuatro semifinalistas de la Copa de Europa de balonmano son de un mismo país, España. Xavi Pascual y su ‘staff’ llevan las riendas al FC Barcelona y han transformado su juego hasta convertirlo en un referente, David Davis dirige al Veszprém, Raúl García Parrondo al Vardar y Talant Dujshebaev maneja el talento de sus hijos en el Kilece polaco.

El dato es curioso, pero lo es todavía más cuando se cae en la cuenta de que los cuatro entrenadores del décimo aniversario de la final a cuatro estuvieron presentes en la primera edición. Entonces, Talant dirigía al Ciudad Real, Davis y Parrondo ejecutaban sus órdenes en el conjunto manchego y Pascual ya estaba al frente del Barcelona.