Alisson, el talismán de las remontadas al Barça

Deja Vu. Eso es lo que vivió Alisson Becker en la estrepitosa derrota del Barcelona en manos del Liverpool (4-0), que dejó al Barça en las puertas de la final de la Champions League. Una sensación de familiaridad para el portero brasilero tras el pitazo final en Anfield Road, que recordó cual fue el vigor que mantuvo a él y a sus compañeros vivos en la debacle de Roma 2018, cuando aún era portero del equipo de la capital de Italia. 

Él fue la fortaleza imbatible desde el fondo del campo en el 3-0 en el Estadio Olímpico de Roma hace poco más de un año. Él fue quien pudo mantener el arco en cero ante el acecho de dos fieras del área, dos de los mejores goleadores de la historia como lo son Lionel Messi y Luis Suárez, que dejó al Barcelona, también con Ernesto Valverde a la cabeza, sin Liga de Campeones el año pasado.

En la final de la Champions pasada el Real Madrid tuvo un poco de fortuna, por no decir mucha, que estuvo Loris Karius como arquero del Liverpool quien, con sus yerros groseros, permitieron a los 'blancos' alzarse con la tercera orejona consecutiva. Esos errores del portero alemán derivaron en la compra del guardameta más caro en la historia del fútbol: Alisson Becker.

73 millones de euros gastó el Liverpool en un portero tras la noche negra de Karius en Kiev el año pasado. Y vaya inversión, que las vueltas de la vida le retribuyeron a los 'reds' de Jürgen Klopp con una remontada que quedará en la historia del mítico Anfield Road. Con Alisson, a quien no le pesó ser el guardameta más caro de todos y, de vuelta, supo responder ante la presión de los 423 goles que suma la temible dupla ríoplatense desde que juegan juntos en el Barcelona.

Justamente en las semis de la pasada Champions luego de la remontada con la Roma, el conjunto italiano fue eliminado en manos del Liverpool de Salah, quienes luego serían sus futuros compañeros. Es que de haber encajado tan solo un gol tanto en Roma como en Liverpool, la historia hubiera sido otra y la eliminatioria se hubiera vertido a favor del equipo 'culé'. El imbatible Alisson lo ha hecho de vuelta.