Murillo: "Quiero demostrar por qué he sido el elegido"

Tras recorrer una sinuosa carretera secundaria, llena de curvas oscuras, con viajes de ida y vuelta entre Italia y España, Jeison Murillo ha recibido finalmente una ayuda divina. "Gracias a Dios que me ha abierto una puerta grandísima. La más grande que hay en el fútbol. Espero aprovecharla", contó el central colombiano, quien a sus 26 años se asoma al Camp Nou para ganarse el jornal. Viene cedido por el Valencia para seis meses, pero él se ve preparado para "hacer grandes cosas" que le permitan continuar más allá de ese contrato temporal.  

"Queda en mí demostrarle al míster y al equipo por qué fui el elegido" (Murillo)

Si logra convencer a Valverde, el Barça tiene una cláusula de compra fijada en 25 millones de euros para quedárselo en propiedad a partir del mes de junio. "Queda en mí demostrarle al míster y al equipo por qué fui el elegido", proclamó Murillo, convertido en una solución de emergencia para el problema de los centrales que ha castigado la zaga de Valverde.

Con Umtiti pendiente de su dañado cartílago y Vermaelen lesionado, Murillo es un recurso experto y barato

Con Umtiti pendiente de su dañado cartílago en la rodilla izquierda y Vermaelen viviendo, como ya es costumbre, más tiempo en la enfermería que en el césped, Murillo es una alternativa experta y barata (1,5 millones de euros cuesta su cesión), que satisface al técnico.

Quizá no tanto al club porque compromete su apuesta por la cantera, por mucho que Éric Abidal, el secretario técnico azulgrana, asegurara que el colombiano no frena a Chumi, Cuenca o Mingueza, los centrales del Barça B. No frena, pero les relega a la posición de cuarto o quinto central.

"Para nosotros, el tema de La Masia no cambia nada", se apresuró a recalcar Abidal con pocas ganas, todo hay que decirlo, de hablar sobre este asunto. "Hay jugadores que han subido para jugar en el primer equipo. Y seguirán subiendo", añadió después el ejecutivo del Barça sin dar nombre alguno. El único que ha subido, y tiene ya ficha profesional, es Carlos Aleñá.

"Para nosotros, el tema de La Masia no cambia nada. Hay jugadores que han subido para jugar en el primer equipo. A partir de ahí, manda el entrenador. Mejor tener jugadores para competir" (Abidal)

"A partir de ahí, manda el entrenador. Mejor tener jugadores para competir", subrayó Abidal trasladando toda la responsabilidad a Valverde de ese ascensor que suele ir vacio del Mini al Camp Nou. El entrenador, en cambio, ya ha dejado claro que no se debe hacer "demagogia" con la cantera porque a él le exigen resultados inmediatos. Ni el doblete (Liga y Copa) le dio calma el curso pasado. Y con solo dos centrales (Piqué y Lenglet) no le bastaba.

Un partido en tres meses

Por eso, pidió a Murillo. Todo un misterio. Un misterio porque solo ha jugado un partido en los tres últimos meses con el Valencia. Por eso, pidió a Murillo, que lucirá el 17 que llevaba Alcácer la pasada temporada. Todo un misterio. Un misterio porque solo ha jugado un partido en los tres últimos meses con el Valencia. Fue la ida de la Copa contra el Ebro el pasado 30 de octubre. En septiembre , disputó dos partidos: Celta (Liga) y Juventus (Champions), ambos en Mestalla.

Pero Valverde no quiere experimentos como el de Yerry Mina, que llegó directamente desde Brasil (jugaba en el Palmeiras) al fútbol europeo. "Jeison puede jugar de central derecho, pero también de lateral", aseguró Abidal. "Conoce bien la Liga, es rápido, contundente, tiene mucho carácter, va bien de cabeza, tanto a nivel defensivo como ofensivo", aseguró el secretario técnico.  

Sin comentarios sobre Rabiot

No se ha abierto aún el mercado invernal (será el 1 de enero) y Valverde ya tiene el central que necesitaba. Y pedía. Pero el club, como precisó Abidal, "sigue atento al mercado", tanto en las salidas (Munir y Denis Suárez) como en otro fichaje. Ni una palabra quiso decir el máximo responsable del área deportiva sobre Adrien Rabiot, el centrocampista del Paris SG, que vivirá los próximos seis meses en el banquillo por su negativa a renovar. Seis meses en los que Murillo se juega su futuro en la elite.

Detectado por la familia Pozzo en el Mundial sub-19 del 2009 con Colombia cierra un largo viaje hasta el Camp Nou

Llegó con 18 años al filial del Granada, jugó en la Primera Andaluza, tras ser comprado por la familia Pozzo por su gran Mundial sub-19 con Colombia en Nigeria (acabó cuarto). Los mismos que detectaron también el talento de un desconocido Alexis Sánchez. Granada, Cádiz, Las Palmas ("algún día jugaré aquí con la camiseta local", dijo un día Murillo cuando estaba en Segunda), Inter, Valencia y, ahora, la puerta abierta del Camp Nou.

De lo joven que se vino a Europa no le dio tiempo ni a debutar con el Deportivo Cali, el club donde se formó. "Nacido en Barranquilla", leía Jordi Mestres, el vicepresidente deportivo azulgrana, en la presentación. "No, Cali", le corrigió educadamente Jeison, feliz por culminar el viaje soñado.