En Directo

EXHIBICIÓN AZULGRANA

Messi se pone el traje en Wembley

El Barça, impulsado por la magia del argentino, se reencuentra con el fútbol y bate al Tottenham (2-4)

Leo Messi celebra uno de los tantos del partido

Leo Messi celebra uno de los tantos del partido / periodico

Rafa Tapounet

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Barça ha vuelto. Y en el mejor escenario: noche de Champions en Wembley. Después de una exasperante racha de tres partidos sin ganar en Liga, el equipo de Valverde, conducido por un Messi de otro mundo, dio un golpe sobre la mesa y demostró, con una sufrida pero merecidísima victoria frente al Tottenham (2-4), que la máxima competición continental (“esa copa tan linda”, en las ya célebres palabras del capitán) sí es un objetivo al alcance de esta plantilla.

Que el FC Barcelona no había viajado a Londres a hacer turismo es algo que quedó claro desde el momento en que los jugadores bajaron el martes del avión con sus molones trajes de tres piezas de Thom Browne. Una encomiable forma de mostrar respeto al rival, a la cita y a la propia historia del club (solo cabe objetar que Messi, Suárez y Coutinho se olvidaran de ponerse calcetines). Ernesto Valverde también decisió honrar la importancia del encuentro desde la pizarra con una alineación valiente. Cuando todo invitaba a abrigarse, cuando todo hacía pensar en la vuelta al 4-4-2 y la presencia de Arturo Vidal para poner cemento en la medular, el Txingurri apostó por el joven Arthur Melo, que respondió al exigente encargo con la entereza de un veterano y dejó claro que las comparaciones con Xavi no son en absoluto descabelladas.

Respuesta con contundencia

Con Arthur en el centro del campo, el Barça se reconoció por fin a sí mismo: spudo ordenarse a través de la pelota y ocupar los espacios con mucho más criterio que en los últimos partidos. Como si los futbolistas no se hubieran quitado el traje para salir al césped. También ayudó, por supuesto, el madrugador gol de Coutinho, que puso con ventaja a los azulgranas desde el primer minuto de partido. Que no es poca ayuda.

Con el marcador a favor, los de Valverde se dedicaron a controlar el juego y a contener al rival, que no hizo su primer disparo a la portería de Ter Stegen hasta el minuto 25. Fue una mala idea. El Barça respondió al aviso con contundencia: ataque fulminante conducido por Messi, remate en semifallo de Coutinho, que enmienda el error y pone el balón en el borde del área para que Rakitic lo envíe a la red de una volea espectacular. Un golazo. A partir de ahí, el partido apenas se movió, mecido por el fútbol de control de los barcelonistas, hasta que el árbitro pitó la llegada del descanso (en realidad, en ese tramo ocurrió algo reseñable: en el minuto 44, Arthur falló un pase).

La magia del '10'

Si la primera mitad fue plácida, la segunda resultó febril. Y tuvoo, por encima de todos, un protagonista indiscutible: Leo Messi. Al argentino solo le faltó sacarse de la boca una ristra de pañuelos de colores anudados entre sí para poner la guinda a su exhibición de magia. Decir que marcó dos goles y envió dos lanzamientos al palo (¡lleva siete en nueve partidos!) es esbozar un retrato muy pobre de lo que hizo el rosarino en esos 45 minutos. Porque la verdad es que hizo de todo. Y en el momento, además, en que su equipo más lo necesitaba, después de que los arreones de un Tottenham de juego discontinuo pero con pólvora en la delantera (el gol de Kane fue una delicia) pusieran en evidencia la fragilidad, una vez más, de la defensa azulgrana.

Messi, en cualquier caso, no estuvo solo. Le asistieron en su espectáculo un pletórico Jordi Alba, que convirtió su banda en el corredor de la muerte para los Spurs, un Coutinho más fluido en la punta que como volante, y un generoso Luis Suárez, que sigue, eso sí, sin encontrar la portería cada vez que viaja por Europa.

Llevaba el Barça una victoria en sus últimas siete salidas en la Champions. Pero Wembley es Wembley. El norte magnético al que señala la brújula del Barça cada vez que se desorienta. La casa del fútbol. La casa de Messi.

Ficha del partido

Tottenham: Lloris (4), Trippier (6), Alderweireld (5), Sánchez (5), Davies (6), Winks (7), Wanyama (5), Lucas (6), Lamela (6), Son (5), Kane (8). Cambios:Sissoko (4), por Son (min. 66). Llorente (-), por Lamela (min. 78)