El comité de competición abre expediente a Piqué

El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha abierto un un expediente extraordinario a Gerard Piqué, jugador del Barça, por las palabras pronunciadas tras el partido de Copa contra el Espanyol, en el que los azulgranas eliminaron a los blanquiazules, y donde catalogó al conjunto perico como "el Espanyol de Cornellà". Sus comentarios motivaron un escrito de protesta del Espanyol y una queja del Ayuntamiento de Cornellà de Llobregat.

Ahora, deberá ser un juez instructor quien determine si el defensa azulgrana merece una sanción o no por sus palabras sobre el Espanyol. Paralelamente, este jueves se reúne en Madrid la Comisión Antiviolencia que tiene en el orden del día analizar la protesta blanquiazul sobre Piqué.

El lunes, el día de la firma de su renovación, Piqué explicó que no se arrepentía de sus palabras. “No me arrepiento de haberlo dicho porque es una obviedad que es de Cornellà”, señaló. “El otro día vino a jugar La Penya, que es el Joventut de Badalona”.

Días antes, el Espanyol había escrito en un comunicado oficial en el que instaba al Comité Antiviolencia a adoptar medidas. “Sus palabras hacia la ciudad de Cornellà flirtean muy peligrosamente con actitudes xenófobas y que, en todo caso, generan claramente violencia e intolerancia en torno a nuestro deporte”, se leía en la nota. El de Competición ha decidido investigar el caso, como adelantó la Cadena SER. 

Críticas a Busquets

En esa nota también recibió críticas y por tanto fue señalado Sergio Busquets. Por decir algo tan aparentemente inocuo como esto tras constatarse la eliminación del Espanyol: "Ellos lo celebraron como si hubieran pasado de ronda tras ganar en la ida (1-0), pero las eliminatorias duran 180 minutos y les hemos demostrado que somos muy superiores".

Ahora se debe nombrar un juez instructor que escuchará las alegaciones de todas las partes y decidir si se sanciona a los futbolistas o se dictamina un sobreseimiento.

El presidente del Comité de Competición, Francisco Rubio, no está bien visto en el FC Barcelona y, de hecho, solicitó el año pasado a la RFEF que tomase medidas contra él a tenor de unos tuits de tinte catalanofobo durante tras el referéndum independentista del 1 de octubre. La directiva de Bartomeu ya intentó en anteriores ocasiones recusar a Rubio, declarado madridista.