Rafinha, una puerta para el lateral

Rafinha lleva meses meditando sobre su futuro. El Barça, al mismo tiempo, medita sobre el futuro de Rafinha, convencido de que puede ser una buena salida incluirlo en la operación Bellerín, como avanzó el diario Marca, obsesionado como está el club por el fichaje prioritario de un lateral derecho. Además, la superpoblación de centrocampistas que habitan ahora mismo en el Camp Nou, sin contar a los refuerzos que espera ansiosamente Valverde para esa zona juegan en contra de Rafinha. Verratti, o uno similar, como mínimo, sin descartar incluso la posibilidad de que llegara hasta un segundo centrocampista.

Os deseo todo lo mejor. Que seáis muy felices 💍 @MarcBartra @MELI_JIMENEZ pic.twitter.com/B6lvpUPg9p

— Rafinha Alcantara (@Rafinha) 19 de junio de 2017

De momento, el club no da pistas. Rafinha, tampoco. Anda preocupado en recuperarse lo mejor posible de la lesión que padeció a inicios del pasado mes de abril en Granada. Se sometió a una artroscopia en el menisco interno de la rodilla derecha justo cuando se había asentado en el once inicial ejerciendo en esos momentos de extremo derecho con aquel innovador 3-4-3 que utilizó Luis Enrique para reanimar al Barça después del varapalo del PSG (4-0) en Europa.

LA VIDA SIN LUIS ENRIQUE

En esa provisional lista de ocho centrocampistas figura también Arda Turan, otro de los jugadores a los que el Barça busca destino. Al turco, que lleva un final de temporada horrible (jugó solo tres partidos en los tres últimos meses y se despidió de la selección tras pelearse con un periodista en un avión) también se le ha vinculado con el Arsenal, necesitado como está Wenger de centrocampistas.

"Me quedo en el Barça sí o sí. El club me ha dicho que cuenta conmigo" (Denis Suárez)

Con Denis Suárez, en cambio, la situación es bien distinta. «Me quedo en el Barça sí o sí. El club me ha dicho que cuenta conmigo», reveló el joven interior gallego, que recibió aliviado esa confirmación de que Valverde le dará una segunda oportunidad. Esa contundencia del gallego contrasta con las dudas que alimenta el brasileño desde hace semanas.

Rafinha, sin embargo, está valorando la salida teniendo en cuenta que está en el año previo al Mundial de Rusia, por lo que necesita más que nunca continuidad si quiere convencer a Tite de que tiene lugar entre los 23 de Brasil.

Además, Luis Enrique, el técnico que lo rescató de Vigo, donde exhibió su mejor nivel, tampoco está ya en el Camp Nou. A su edad (24 años), y esperando estar ya con el alta médica a mediados de agosto, le toca decidir su futuro. Hace año y medio, renovó por el Barça hasta el 2020, con 75 millones de euros de cláusula de rescisión.

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El club lo tasaría en 30 millones teniendo en cuenta su juventud y proyección. Liverpool, en su momento, Roma y Valencia (se vio hace unos días a Mazinho, padre y agente de Rafinham en la ciudad deportiva de Paterna), andan, al igual que el Arsenal, tras sus pasos. Falta saber si él también cruzará la puerta de salida del Camp Nou para no volver nunca más como ya hizo su hermano Thiago (2013) para irse al Bayern Múnich.