El Barça se pasa la vida en el juzgado

Los conflictos judiciales del club y de sus protagonistas erosionan la gestión del día a día

Javier Mascherano acude a un juzgado de Gavá en noviembre del 2015.

Javier Mascherano acude a un juzgado de Gavá en noviembre del 2015. / periodico

JOAN DOMÈNECH / BARCELONA

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La acción de responsabilidad social contra la directiva de Joan Laporta, aprobada por la Asamblea de Compromisarios en octubre del 2010, sirve como frontera para iniciar el relato de la intensa vida judicial del Barça en los últimos años. Los numerosos conflictos que se han dirimido en los tribunales han erosionado la actividad cotidiana de la entidad, más allá del gasto que ha supuesto en abogados y costas judiciales y la erosión de la imagen, mucho más incuantificable, que ha supuesto para la entidad.

ACCIÓN DE RESPONSABILIDAD SOCIAL

La demanda, en realidad, se presentó en el mes de julio del 2011 y a Laporta y a 17 de sus directivos se le reclamaba que respondieran para cubrir una presunta pérdida de 47,6 millones, presentando además, los avales correspondientes, que fue objeto paralelamente de otro litigio judicial. Por la Ciutat de la Justícia desfilaron Laporta, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, entre otros: los tres últimos presidentes del Barça.

El Juzgado de Primera Instancia número 39 falló contra el Barça desestimando la demanda. No solo no vio pérdidas en el mandato de Laporta (2003-10) por la reformulación de las cuentas que habían efectuado los sucesores, sino que observó beneficios económicos. El club recurrió a la sentencia a la Audiencia Provincial.

MCM Y MARIO CONDE

En noviembre del 2013 fue admitida a trámita una demanda de la empresa MCM (Muro Cortina Modular Publicidad) contra el Barça al que le reclamaba 100 millones por daños y perjuicios por no haber podido explotar la fachada de la nueva Masia de Sant Joan Despí. A MCM la representó en la sala (en marzo del 2015) Mario Conde y reclamaba el incumplimiento de un contrato que firmó Laporta y debía atender Rosell. El proceso acabó en manos de la junta de Bartomeu. En junio del 2015, el juez desestimó la demanda e impuso a MCM las costas judiciales. MCM tramitó inmediatamente un recurso.

LA SANCIÓN DE LA FIFA

La FIFA castigó al Barça en abril del 2014 con la prohibición de hacer fichajes en dos mercados y una multa de 450.000 euros por haber infringido el artículo 19 del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores que prohíbe el fichaje de menores de 18 extracomunitarios excepto en el caso de que los padres hubiesen cambiado de país, si el futbolista vivía a menos de 50 km de la frontera o si la transacción de un jugador, entre 16 y 18 años, era entre equipos de la Unión Europea.

El club había sido avisado antes con la prohibición expresa del organismo de alinear al delantero coreano Lee Seung Woo a raíz de una denuncia anónima. Pero no era el único que no cumplía la normativa. Hubo una veintena de casos investigados en la cantera. A los chicos se les prohibió jugar (más tarde entrenarse e incluso residir en la Masia), algunos se marcharon, y el club, efectivamente estuvo dos periodos (invierno 2014-15 y verano 2015-16) sin fichar. Aleix Vidal y Arda Turan fueron contratado el pasado mes de julio pero no jugaron hasta enero.

MASCHERANO, ADRIANO Y ALVES

Leo Messi solo ha sido uno de los jugadores del Barça investigados por supuestas infracciones fiscales; ha sido, sin embargo, quien ha salido peor parado. A Javier Mascherano se le abrió un procedimiento (septiembre del 2015) por el supuesto impago del IRPF de 1,5 millones en el 2011 y el 2012.

'El Jefecito' también pasó, como Messi, por el amargo trance de ser sometido a juicio y declarar ante un tribunal. Aunque había llegado a un acuerdo con la Fiscalía. Mascherano aceptó la pena de un año de cárcel y una multa de 800.000 euros tras haber regularizado su situación.

El pasado mes de mayo, la Fiscalía también denunció a Adriano Correia por, igualmente, haber defraudado 646.085 euros a Hacienda de los años 2011 y 2012. Como Mascherano, no pagó lo que correspondía por el IRPF por ingresos en derechos de imagen cobrados a través de una sociedad radicada en Madeira.

El Ministerio de Hacienda ha publicitado una nueva lista de contribuyentes morosos con Hacienda. No falta la presencia azulgrana: Dani Alves. El defensa brasileña, que se ha ido a la Juventus, debe 1,3 millones a las arcas españolas. Algo menos de lo que tiene pendiente Gabi MIlito, que regresó a Argentina con un pago de 1,83 millones pendiente.

EL INFINITO CASO NEYMAR

El caso Neymar es, en realidad, dos casos. El primero ha durado casi tres años, se ha llevado por delante a un presidente (Rosell) y ha duplicado el coste del fichaje del futbolista brasileño, que en un primer momento costó 57,1 millones (según la versión oficial en julio del 2013), ascendió a 86,2 en enero del 2015 con el reconocimiento de una serie de contratos paralelos vinculados a la operación) y cuyo coste, por ahora, supera los cien millones.

El Barça se ha declarado culpable de dos delitos por "dos infracciones tributarias delictivas" cometidas en el 2011 y el 2013 -en realidad los ha asumido la directiva en nombre de la entidad- y ha aceptado una multa de 5,5 millones para cerrar el litigio judicial que provocó el desfile de toda la cúpula del club (Rosell, Bartomeu, Zubizarreta, Neymar y su padre...) por la Audiencia Nacional de Madrid. A Rosell y Bartomeu se les reclamaban penas de cárcel y una multa añadida.

Aún queda pendiente de sentencia la demanda de DIS, que poseía el 40% de los derechos federativos de Neymar en el momento del traspaso y que se sintió estafada porque el Barça pagó más que los 17,1 millones oficiales que manifestó.

LAS 'ESTELADES' SALEN CARAS

Una inspectora de la UEFA denunció la exhibición de banderas 'estelades' en la final de la Champions de Berlín del 2015 contra la Juventus. El organismo multó al Barça con 30.000 euros. Y el club pagó, argumentando que utilizaría "la vía diplomática" para evitar malos mayores, consciente de quela hinchada azulgrana reivindicaría su derecho a usar el emblema independentista en cualquier momento.

Y llegó. Al comenzar la nueva temporada, en septiembre, el Camp Nou fue un clamor. No solo por la notoria presencia de 'estelades' en la grada, sino porque la hinchada pitó el himno de la Champions en el debut ante el Leverkusen. La UEFA impuso una nueva multa de 40.000 euros. El club, entonces, negoció la suspensión del pago mientras se resolvía el recurso que presentó ante el Comité de Apelación. Salió desfavorable. Y la multa final ha ascendido hasta los 150.000 euros. El Barça reclamará al Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS).

EL ESPIONAJE DE ROURES

Los casos de espionaje han sido dos. El primero, denunciado por el club, iunvolucró a la junta de Laporta. En concreto, a Xavier Martorell, exjefe de seguridad, y a Joan Oliver, exdirector general. Ambos, supuestamente, habían encargado espionajes a personal del club y fuera del club a través de la empresa Método 3, que a su vez, se había visto involucrada en el espionaje de un almuerzo entre Alicia Sánchez camacho, presidenta del PP catalán y Victoria Álvarez, expareja de Jordi Pujol hijo.

El Barça cerró el asunto esta semana al aceptar el pago de 120.000 euros de Martorell y Oliver por ser, presuntamente, la cantidad que ambos emplearon en las actividades denunciadas.

El segundo caso de espionaje fue la demanda que interpuso Jaume Roures, presidente de Mediapro el pasado més de febrero. Una querella criminal contra Sandro Rosell por haber participado en la intervención de su correo personal a a través, supuestamente, de Robert Cama, exempleado de Mediapro y posteriormente contratado por el club azulgrana. Roures también denunció a Joan Carles Raventos, director de secciones, y al propio club como «víctima y coautor».

El resumen de su azarosa y amplia vida judicial.