Desestimada la demanda contra Laporta presentada por un representante por los negocios con el Barcelona en Uzbekistán

La jueza María José Ortega ha desestimado una demanda presentada contra el abogado y políticoJoan Laporta, expresidente delFC Barcelona, interpuesta por el representante de jugadoresBayram Tutumlu, quien le reclamaba unos 2,5 millones de euros por todas las operaciones que realizó el club catalán y algunos de sus jugadores en la república deUzbekistán.

Según la sentencia, la jueza absuelve a los demandados "de todo pronunciamiento en contra".Tutumlu reclamaba el 10% de los negocios que se movieron entre elBarça yUzbekistán mientrasLaporta fue presidente de la entidad deportiva. La parte demandante ya ha anunciado que recurrirá contra la sentencia.

En superfil de Facebook,Laporta se ha congratulado de la decisión judicial: "La verdad ha ganado". "Los mentirosos oportunistas han perdido y la caverna no se ha salido con la suya. La lucha contra los indecentes continúa, siempre con la verdad y la razón como argumentos para la búsqueda de una justicia merecida", asegura el expresidente azulgrana y diputado en el Parlament en un comentario realizado en la citada red social.

Laporta asegura que seguirá "luchando para que las maniobras indecentes del actual presidente del Barça y su junta", así como de algunos medios que considera contrarios a su persona, "no consigan ensuciar el trabajo hecho para conseguir el mejor Barça de la historia".

Supuestos acuerdos verbales Tutumlu-Laporta

La denuncia arranca de la exigencia deTutumlu de cobrar una comisión tras supuestos acuerdos verbales conLaporta, ya que garantiza que fue él quien le puso en contacto con los empresarios uzbekos. El representante turco denunció públicamente que Laporta "robó" al Barcelona 8,2 millones de euros y que, además, "estafó a sus propios jugadores" al embolsarse determinadas cantidades que supuestamente correspondían a los futbolistas en un acuerdo que firmó en abril del 2008 con dirigentes de la República deUzbekistán.

Tutumlu siempre ha defendido que fue él quien conectó a Laporta con el magnate uzbekoMiraldil Djalalov, con quien cerró, por cinco millones de euros, un acuerdo por el cual el Barça debía disputar dos partidos amistosos con el Budyonkor y enviaría a aquel país a varios de sus jugadores para que participaran en un entrenamiento promocional.

"Laporta cobró una comisión de 3 millones de euros que recibió mediante una transferencia a una cuenta de su despacho de abogados (Laporta & Arbós) del BBVA desde un banco suizo", aseguró Tutumlu, quien no aportó ninguna prueba documental del supuesto acuerdo. "Después de su viaje a Uzbekistán se compró un ático en la Diagonal que vale dos o tres millones de euros. Si era presidente del Barça, ¿de dónde ha sacado todo ese dinero?", se ha preguntado.

Laporta cobró 10 millones

En el juicio, que se celebró a mediados del mes pasado,Laporta reconoció haber cobrado10 millonesde euros a través de su despacho de abogados por asesorar al magnate uzbeko Miradil Djalalov mientras era el máximo mandatario de la entidad azulgrana. El expresidente delBarcelona declaró que su bufete facturó a través de Laporta & Arbós Advocats Associats dicha cantidad a Zeromax, empresa propiedad de Djalalov, "por la prestación de servicios de consultoría empresarial durante tres años".

En la vista,Tutumlu aseguró que fue él quién organizó y pagó (cerca de 1.200 euros) la cena del Via Veneto en la que Laporta y Djalalov se conocieron en mayo del 2008, y que el expresidente del club catalán le prometió un comisión por los negocios que hicieran juntos.

Sin embargo,Laporta lo negó todo ante la jueza: "Este individuo, el señor Tutumlu, es un oportunista de esos que hay en el mundo del fútbol para ver qué pillan. Se dedicaba a enredar a todo el mundo. Solo me reuní con él dos veces, por cortesía y ante su insistencia, y no le prometí absolutamente nada".

También en la vista, Laporta se atribuyó todo el mérito de esta segunda operación. "Logré convencer a los deZeromax para que firmaran un contrato de cinco millones por jugar dos amistosos y hacer unstageen Barcelona. Conseguimos un contrato buenísimo, ya que cobramos tres millones en el momento de la firma y pactamos otros dos por un segundo amistoso que finalmente no se llegó a celebrar", subrayó.