Entrevista a Dani Pérez: “Doy un perfil un poco diferente, el de los antiguos bases”

En un Baxi Manresa volcánico, revelación de la ACB, Dani Pérez pone el contrapunto al vértigo. El base de L’Hospitalet de 31 años analiza su buen momento y el exigente cruce de cuartos ante el Barça de este viernes.

Está siendo una temporada de locura para el Manresa ¿Cómo explica el gran momento del equipo? En verano se tiene que hacer muy bien el trabajo y este año quizás se ha arriesgado más que otros. Hemos fichado jóvenes de otras ligas sin experiencia como Sylvain o Thomasson, que han subido el nivel. Quizás se ha apostado por jugadores más físicos y eso nos ha permitido competir contra equipos de Euroliga y también en Europa de tú a tú. Y, por supuesto, también está el trabajo de Pedro Martínez. El tiene una filosofía, que ha impregnado al equipo. Pero el punto extra este año es sobre todo del derroche físico. A veces pienso que tiene que ser incómodo jugar contra nosotros, un equipo que te aprieta, te presiona, no especula….

¿Cómo es la vida en el paraíso, terceros en la Liga, para un equipo acostumbrado a pelear por la salvación? Desde que estoy en Manresa el objetivo siempre es llegar a las 10 o 11 victorias que marcan la frontera de la salvación. Este año hemos lo hemos logrado rápido y ya ha dejado de ser un objetivo y ahora miramos más allá, yendo partido a partido, para seguir disfrutando esta temporada.

¿Entrar en la Copa se entiende como un premio para el club y la ciudad. Con qué mentalidad llegan? Nosotros al final, no vamos a tener ninguna presión. Jugamos contra el favorito de la Liga y de la Euroliga y nosotros nos lo tomamos como un premio con ganas de disfrutar, y con la idea de competir a muerte.

Jasikevicius ya dijo que era el peor rival que les podía tocar.¿Cómo analiza el cruce con el Barça? Les ganamos en la Lliga Catalana y también en la ACB, aunque es verdad que ellos salían del covid. Pero en los dos nos llevamos la victoria. Seguro que será diferente. Vamos a prepararlo super bien y ojalá sea muy disputado…

¿Les recuerdan mucho la victoria del Manresa en la Copa del 96? No, han pasado muchos años. La gente está ilusionada, pero con los pies en el suelo. Es muy complicado quitarle una Copa al Barça o al Madrid, más siendo el Manresa. Si haces una comparación de presupuesto parece un chiste.

Su camino hasta arriba ha sido trabajado, después de pasar por Leb Oro, Cornellà, Lleida, Menorca, Fuenla, GBC ¿Lo saborea más? Al final es un tema de constancia, cuando estaba en la cantera del Barça, no tuve la oportunidad de llegar al primer equipo y me tuve que buscar la vida pasito a pasito, picando piedra. Hasta que en Fuenlabrada y Donosti conseguí hacer ruido. Si no hubiera trabajado tanto, no ha llegado a consolidarme o a debutar en la selección o ser el máximo asistente de la Liga el año pasado. Estoy muy orgulloso.

Usted responde a la idea del base clásico, casi una especie en extinción. Sí yo creo que doy un perfil un poco diferente de los antiguos bases, que buscaban hacer jugar más al equipo juego, cuando la evolución que está llevando la posición es hacia un base más físico, que busca el uno contra uno y el lanzamiento. Aprendí en los 90 fijándome jugadores como Nash, Jason Kidd, Jasikevicius, Nacho Rodríguez. Nada que ver con los chavales de hoy en día que se fijan en Curry o Durant.

¿Cuánto ha infuido Pedro Martínez en su salto en los últimos tiempos, que le ha abierto la puerta de la selección? Mucho. Cuando pasen los años y valore lo que ha sido mi carrera,  si no ha sido el más importante estará por ahí. Es un entrenador super exigente y consigue que saques lo mejor de ti. Me costó, pero te lleva al máximo.

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