El Barça asalta la pista del campeón Efes con un partidazo de Sanli

En su vuelta a Estambul para enfrentarse a sus excompañeros del Anadolu Efes, Sertaç Sanli se graduó con todos los honores como jugador del Barça. La suya fue una actuación espléndida (24 puntos, 3 rebotes, 4 de 5 en triples) que permitió al conjunto catalán dar un golpe en la mesa y vencer en la cancha del campeón después de un partido agónico, que se fue a la prórroga y que los jugadores de Jasikevicius resolvieron echando mano de carácter (93-95).

No debía ser fácil para Sanli a nivel emocional la vuelta al Sinan Erdem, la cancha del Efes donde jugó las tres últimas temporadas. Pero si fue así no lo acusó. “Era muy difícil para mí. No puedo describir mis sentimientos. Solo intenté hacer mi trabajo”, explicó el pívot turco, pieza clave, para darle la vuelta a un partido que los azulgranas perdían con claridad en el descanso (47-37) y al que consiguieron darle la vuelta gracias a su dominio del rebote (45 rebotes frente a 26) y, en especial, a su trabajo defensivo, que desconectó a algunas de las piezas claves del Efes como Larkin (14 puntos, eliminados por faltas) o Beaubois (6), aunque no a Micic (26 puntos), el MVP de la última temporada.

Técnicas y eliminados

El partido tuvo toda la tensión y la calidad que se esperaba de la repetición entre los dos finalistas de la última Euroliga, que cayó del lado turco. Mirotic acabó eliminado por faltas antes de la prórroga (con faltas muy rigurosas), Jasikevicius recibió una técnica y Ataman, técnico del Efes, fue expulsado por dos técnicas por sus continuas protestas en el tiempo extra. En ese escenario, el Barça encontró su pequeña venganza por la derrota en la final europea en territorio enemigo. Fue un golpe encima de la mesa, además con un equipo muy mermado por las lesiones de Calathes, Higgins y Abrines. Pero eso obligó al banquillo a dar un paso adelante. Lo hicieron Sanli, que se coronó con una actuación portentosa. Cumplieron Mirotic (18 puntos) Laprovittola (14 y 8 asistencias),  Kuric (16 puntos) y el joven Sergi Martínez, que sigue ganándose los minutos.  Y también debió hacerlo Nigel Hayes. Pero no acaba de asumir el rol importante que se espera de él. Hay días en los que parece en condiciones de dar un paso adelante. Y actuaciones desesperantes como la que ofreció en Estambul.

El Barça demostró, además carácter, para sobreponerse a un mal primer tiempo en el que cometió demasiados errores y se mostró vulnerable en defensa. Fue capaz de engancharse  a la pelea tras la reanudación con un parcial de 0-7 y mostró su versión más competitiva con las rachas anotadoras de Mirotic y Laprovittola y, sobre todo, con el día de inspiración de Sanli. Pudo decidir incluso el partido antes del tiempo reglamentario porque entró en los últimos minutos con cinco puntos de ventaja (75-80), pero el Efes tiene alma de campeón y el Barça necesitó doblegarlo hasta tres veces antes de llevarse un triunfo que sabe a gloria.