Una exhibición de Bassas no evita la eliminación del Joventut

Una actuación prodigiosa de Ferran Bassas, autor de 26 puntos, con 7 triples de 10 intentos, no le bastó al Joventut para evitar la eliminación en los cuartos de final de la Eurocup frente al Virtus Bolonia, que venció en Badalona (78-84), igual que había hecho en el partido de ida, y se abrió paso hacia las semifinales. La demostración de orgullo y el acierto de Bassas permitió a la Penya levantarse en un partido que llegó a tener con 23 puntos en contra y pelearlo en los últimos cuatro minutos (72-71) en los que dos triples de Markovic y Teodosic sentenciaron.

El sueño europeo del Joventut empezó a complicarse ya en una primera parte en la que no le salió nada. Desde el inicio se pudo que el equipo de Carles Duran no estaba cómodo en la cancha frente al despliegue físico y la agresividad defensiva de los italianos, que jugaron al límite de la falta, utilizando mucho las manos y los contactos.

Faltas de Tomic

Con Markovic y Teodosic sobrados de experiencia y confianza, fue el Virtus Bolonia el que consiguió marcar el ritmo de partido y abrió márgenes que aumentaron la presión y el nerviosismo en el Joventut. Obligados a jugar en estático, los jugadores verdinegros perdieron demasiados balones, estuvieron muy desafortunados desde el triple (3 de 14 al descanso) y  permitieron canastas muy fáciles, en conexiones cerca del aro y en fulgurantes contras que dejaron en evidencia las transiciones defensivas del cuadro catalán.

La superioridad de centímetros de la Penya tuvo su peso en Bolonia. Pero no fue un factor importante en Badalona. Las tres faltas personales de Tomic limitaron mucho el potencial de los verdinegros, porque ni Birgander ni Brodziansky consiguieron darle un relevo de calidad. Y para más inri, llegó la lesión de López-Arostegui antes del descanso  (21-33, m. 15), cuando estaba siendo uno de los más resolutivos en los esquemas de Duran, lo que dejó muy tocado al Joventut  (31-43 al descanso).

Tanto acusó el golpe, que el equipo verdinegro llegó a verse al borde del KO con el Virtus totalmente desatado (32-55, m. 25). Pero Bassas se negó a tirar la toalla y devolvió a su equipo a la vida con cuatro triples consecutivos, alguno de ellos desde 8 metros, que arrastraron a sus compañeros y dejaron abierta la puerta de la esperanza para el último periodo (54-64), en el que la Penya llegó a ponerse incluso por delante (72-71, m. 37). Pero en el mano a mano final, la experiencia de Teodosic y el cuadro italiano acabó por decidir.