El Divina Joventut se hunde ante el Madrid en el último cuarto (92-69)

El Real Madrid consiguió la cuarta victoria en la Liga Endesa al vencer por 92-69 a un Divina Seguros Joventut que dio guerra hasta el último cuarto, cuando la conexión argentina de Facundo Campazzo y Gabriel Deck hizo despertar al equipo local.

La buena puesta en escena del equipo de Badalona frente a un Real Madrid un tanto apático cuya única idea ofensiva era el lanzamiento triple se tradujo en el dominio verdinegro en el primer cuarto, con Shawn Dawson y Nicolás Laprovittola como maestros de ceremonias. En el Madrid, solo a Klemen Prepelic se le veían ganas de hacer méritos ante su entrenador, Pablo Laso, y los aficionados.

Buen juego, escasa renta

El 22-23 con el que finalizaron los primeros diez minutos parecía escasa renta para el Joventut, que daba la sensación de estar dando casi todo lo que tenía mientras los blancos andaban muy lejos de su mejor versión, sin ideas, sin intensidad, sin circulación de balón y sin apena defensa. Rudy Fernández y Felipe Reyes salieron al rescate del Real Madrid. Jaycee Carroll no fue el revulsivo habitual (1 de 4 en triples) y tuvo que ser el argentino Gabriel Deck el que comenzara a demostrar por qué llamó la atención del vigente campeón de Liga. Los catalanes mantuvieron una ajustada ventaja hasta que en los últimos minutos del segundo cuarto los blancos impusieron su mayor calidad y consiguieron alcanzar los vestuarios por delante en el marcador (44-39).

Tras la reanudación, con las fuerzas ya mermando, el Madrid hizo valer su fondo de armario, aunque los jugadores de la Penya supieron reaccionar y llegar al final del tercer cuarto con opciones (65-60). La falta de ritmo lastró el juego de ambos equipos, pero bastó otro arreón blanco, con una buena circulación de balón finalizada con corte por el centro de Campazzo y un triple de Carroll, para que la victoria se abriera de par en par para los locales, que en tres minutos y medio endosaron un parcial de 12-0 al Joventut, que solo anotó siete puntos en el último cuarto.