El Barça pierde contra el Baskonia en semifinales de la Supercopa

El renovado Barcelona de Pesic, el primero post-Navarro, no pudo con Baskonia (76-79), que disputará este sábado (19.15 horas) la final de la Supercopa contra el Real Madrid,que se deshizo del anfitrión, el Obradorio (61-81). Un gran segundo cuarto permitió a los vitorianos tener una holgada ventaja que estuvieron a punto de perder como consecuencia de un parcial en contra (32-13) que dio opciones a los blaugranas en los últimos minutos.

Los primeros momentos fueron más propios de pretemporada que de partido oficial. A las imprecisiones propias de los inicios, se le unió una falta de intensidad por parte de ambos equipos que permitió a Claver, un jugador con no muchos puntos en sus manos, anotar 7 tantos seguidos. En cuanto Baskonia aumentó la intensidad defensiva, comenzaron los problemas para el Barça. Kuric y sus 12 puntos seguidos solo consiguieron minimizar los daños que Baskonia inflingía (21-22 min.10). A partir del segundo cuarto ni él ni Pangos (10 puntos, 20 de valoración) lograron amarrar a los vitorianos.

Desesperación azulgrana

Los vascos seguían al dedillo los dictados de Pedro Martínez, esos que ya son característicos desde el año pasado: defensa intensa y transiciones rápidas si hay oportunidad. Además de dejar correr al Baskonia, el Barça fue incapaz de proteger las esquinas en la defensa en estático. Desde allí, Garino (11 puntos en la primera parte, incluidos tres triples) o Voigtmann castigaban los continuos desmanes defensivos de los catalanes (34-49 min. 20).

Heurtel y Oriola personificaron la desesperación azulgrana. El galo tuvo una primera parte para olvidar (0-5 en tiros) y el segundo protagonizó una de las imágenes del partido cuando golpeó una valla publicitaria tras unos grises minutos en cancha.

Cambio de inercia

El tercer cuarto, contra todo pronóstico. se transformó en el salvavidas del Barcelona. Baskonia se llegó a poner 20 arriba (min. 24), pero la garra de Oriola, esta vez acompañada de acierto y de un rocoso Roland Smits, encabezó un parcial de 16-6 que volvió a meter a los de Pesic en el partido.

La intensidad cambió de bando. Un Barça enconrajinado y muy físico maniató el ataque baskonista y un triple de Kuric, su tercero, les colocó a tan solo un punto (72-73 min. 37) y con la sensación de que la inercia les llevaría a la remontada. Ésta, finalmente, no se culminó. Pedro Martínez puso el balón en las manos de uno de sus hombres con más jerarquía, Granger, que con una bandeja y una gran asistencia al desaparecido Shengelia, puso en ventaja a falta de un minuto del final.

En ese momento el 'instant replay', la nueva medida que la ACB ha puesto en funcionamiento en esta competición y que permite a los entrenadores pedir la revisión de ciertas jugadas, demostró lo influyente que va a ser. Un tapón de Singleton a Shields, en principio sancionado como ilegal, fue revisado y la decisión, revocada, dando así oportunidad al Barcelona de gozar de una posesión para empatar. Sin embargo, Kuric primero y Oriola después no consiguieron anotar y el Baskonia se convirtió en el primer finalista de esta Supercopa.

El Real Madrid cumplió después con los pronósticos y se metió en la final tras exhibir su mejor baloncesto ante un Monbus Obradoiro que, aunque lo intentó ante su público, acabó sucumbiendo ante el tremendo acierto de un rival que lo bordó tras el descanso (61-81).

Los blancos sufrieron más de lo previsto para irse por delante a los vestuarios y rompieron el partido en la reanudación a base de triples y de la mejor versión de Sergio Llull (17 puntos, seis asistencias y 19 de valoración) en un gran tercer cuarto en el que un parcial de 8-28 terminó por minar la resistencia de los anfitriones.