Ricky Rubio impulsa en Barcelona su Fundación contra el cáncer

Por la cabeza de Ricky Rubio, el exitoso base catalán que juega en la NBA, actualmente en los Utah Jazz, siempre había pasado la idea de crear una fundación con el objetivo de ayudar a los demás.  “Pensaba que eso sería cuando me retirara”, explicaba este jueves en Barcelona en la presentación de un proyecto que ya es una sólida realidad: Ricky Rubio Foundation.

El punto de inflexión que hizo que todo se precipitara fue el verano del 2012, cuando a su madre, Tona Vives, le diagnosticaron cáncer de pulmón. Ricky, como toda su familia, se volcó con ella en un largo proceso de cuatro años. El tratamiento empezó en la Dexeus y siguió en Minnesota, donde Ricky estuvo seis años jugando, desde su llegada a la liga. En una de las últimas conversaciones con ella, recordaba emocionado, mientras la acompañaba a la clínica en coche, le hizo la promesa que ha empezado a cumplir.

“Este ha sido uno de los días más importantes de mi vida”, aseguró Ricky. “Quiero que en mi Fundación participen todos, estamos abiertos a propuestas, ideas y a colaboraciones que no tienen por qué ser sólo materiales. Si tienes tiempo, ayuda, si eres panadero lleva pasteles a un hospital y si eres alegre… entonces tráenos una sonrisa”, resumió el jugador de El Masnou.

“Le prometí que haría todo lo posible por ayudar a otra gente que pasase por una situación como la que nos tocó vivir y que ayudaría a los más pequeños. Y aquí estoy, presentado esta fundación para luchar contra el cáncer, a mejorar la vida de los pacientes y de sus familias y también para ayudar a los más pequeños”, explicó Ricky en la introducción de su proyecto. “Ayudar a los demás es lo que da valor a este mundo”, resumía, ante la mirada lacrimosa de su padre, Esteve, presente en el acto, igual que su hermano Marc y personas muy próximas al jugador, como el médico Ángel Charte, máximo responsable médico del Mundial de Moto GP.

Apuesta gobal

Para dar a conocer la iniciativa, Ricky se rodeó de algunas de las personas que han estado con él en estos años. El doctor Santiago Viteri, de la clínica Dexeus, el oncólogo que siguió el día a día de la enfermedad de su madre, investigadoras como Teresa Alonso, que buscan tratamientos con los que luchar contra la enfermedad y también personas que se han visto afectadas por el cáncer. A su lado también estuvo su compañero en la selección y jugador del Barça, Victor Claver, que vivió una experiencia similar con su padre.

“Hasta ese momento no sabía que la enfermedad la sufren solo los afectados, sino también las familias”, explica Ricky, que se plantea retos ambiciosos con la fundación y quiere convertirla en una apuesta global.  “La puse en funcionamiento en Minnesota y en Utah, y ahora también en Barcelona. La idea es desarrollarla con acciones cerca de donde esté, pero la intención es no limitarla” , aclara el jugador catalán, que quiere abrir el proyecto para trabajar para la integración y la la formación social de niños en barrios desfavorecidos, como demostró en un acto en el barrio de El Raval.

La plaza Terenci Moix se llenó de niños, vecinos y aficionados que disfrutaron de una tarde excepcional, rematada con la actuación de Pau Donés, un superviviente de cáncer que con su determinación y esfuerzo ha superado por dos veces el ataque de esta enfermedad.