Badalona celebra la suspensión temporal de la instalación de pantallas acústicas en la Rambla y en la calle Santa Madrona

El Ayuntamiento de Badalona (Barcelonès) ha valorado “muy positivamente” el anuncio que la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del Gobierno del Estado, Raquel Sánchez, hizo hace un par de días en el Senado informando sobre la suspensión temporal de la colocación de las pantallas acústicas que debían instalarse en el paseo de la Rambla de Badalona -en concreto, frente a un equipamiento educativo y a un centro residencial situados en la Rambla y en la calle de Santa Madrona- con la voluntad de reducir el ruido de los trenes que pasan por delante.

La ministra manifestó que esta decisión se ha tomado después de que varios municipios catalanes afectados, entre ellos Badalona, hayan buscado vías alternativas al proyecto inicial presentado por Adif que no pasaran por “invadir un espacio de dominio público municipal y paisajístico, sino que adoptaran medidas para evitar la transmisión de vibraciones en las edificaciones, la contaminación acústica o de otras medidas dirigidas a la propia infraestructura ferroviaria como la modernización del sistema de rodadura y frenado o el mantenimiento de carriles y travesías entre otros”, explican desde el consistorio.

"Desde el primer día de mi investidura he dicho que no vamos a permitir que ningún muro divida esta ciudad, no vamos a permitir que haya muros de cuatro metros alrededor de nuestro patrimonio histórico y celebramos el hecho de que el Ministerio haya tomado conciencia del tema" ha asegurado el alcalde de Badalona, Rubén Guijarro.

Rechazo unánime del Pleno

Ya el pasado mes de septiembre el Ayuntamiento de Badalona se reunió con la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos de Barcelona de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), para valorar el proyecto de ADIF y encontrar alternativas a la instalación de estas pantallas acústicas para minimizar el ruido que provocan los trenes al pasar por este sitio de la ciudad.

También que en el Pleno extraordinario celebrado el pasado 2 de septiembre se aprobó por unanimidad de todos los grupos municipales una moción de apoyo a las alegaciones que el Ayuntamiento presentó en el proyecto de ADIF donde se hacía constar que "las pantallas podían convertirse en muros para grafitos con la degradación para el espacio que ello conlleva y el coste económico que supone su constante limpieza", así como "la inseguridad que puede acarrear levantar una pantalla de tres metros de altura en un tramo de 59 metros de longitud y otra pantalla de cinco metros de altura en un tramo de 34 metros de longitud".

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