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Latin Kings y Ñetas sellan la paz a ritmo de hip-hop

Ambas pandillas editan un CD y relatan en un libro y DVD su hermanamiento

Varios integrantes de la asociación posan en el patio del CCCB.

Varios integrantes de la asociación posan en el patio del CCCB.

NÚRIA MARTORELL
BARCELONA

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Jóvenes pertenecientes a los Latin Kings y los Ñetas --pandillas que hace relativamente poco eran noticia en Barcelona solo por sus enfrentamientos-- han montado en el Kasal de Joves de Roquetes (Nou Barris) una fructífera asociación llamada Unidos por el Flow. ¿El resultado? Un libro y un DVD en el que explican su proceso de hermanamiento y un animado disco de hip-hop americano, reggaeton y ritmos latinos. "Y, sobre todo, la constatación de que se puede cambiar y ayudarse mutuamente", explica Edgar Belfort Llanero, presidente de dicha asociación.

"Cuando la mente está vacía, se piensan y se hacen cosas malas. Yo, por ejemplo, antes consumía alcohol y drogas, y ahora ya no", añade este ecuatoriano de 27 años, autor de rimas como "¿Qué pasa con la diferencia de nuestra raza? / Dejen el punto de mira, guarden sus bates de caza".

LEGALIZADOS

Con grafitos y cómics intercalados, el libro titulado como el álbum y la asociación (Unidos por el Flow) recoge la transformación e integración en la sociedad de esta entidad ya legalizada por la Generalitat, dejando que sean los protagonistas los que hablen sin tapujos. Así lo aseguraron ellos mismos en la presentación del proyecto en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB), donde en el 2005 los Latins y los Ñetas "salieron del armario" y expusieron su visión de la realidad social ante decenas de investigadores y periodistas reunidos en un congreso, relata Xaime Chispón López, coordinador del proyecto.

En el 2006, también el CCCB acogió un concierto "que congregó a 800 jóvenes en un escenario sin ningún tipo de conflicto". Fue el punto de partida. "Luego montamos talleres de formación musical y les orientamos en todo, pero ahora la asociación camina sola", puntualiza.

El antropólogo Carlos Freixac, colaborador de esta exitosa iniciativa, sostiene que Unidos por el Flow flow se traduciría como fluir es una "pequeña revolución que ha permitido llevar a cabo en Barcelona algo que no ha funcionado en otras ciudades como Madrid, donde ha habido una negativa institucional incluso para encontrar interlocución con estos grupos". "El proyecto --reconoce-- tiene una estructura que rompe todos los clichés".