Social employee advocacy

Nos vemos en las redes sociales: cuando los trabajadores son tus mayores 'fans'

¿Las redes sociales corporativas representan a los trabajadores? ¿Cómo se puede involucrar a los empleados en ellas? Para formar comunidad de seguidores y fans fuera de la propia empresa, lo primero que hay que hacer es crear comunidad dentro. 

¿Las redes sociales corporativas representan a los trabajadores? ¿Cómo involucrar a los empleados en ellas? Para formar comunidad de seguidores y fans fuera de la propia empresa, lo primero que hay que hacer es crear comunidad dentro

Redes sociales corporativas de tu empresa

Redes sociales corporativas de tu empresa / economia

Nora Benito

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¿Las redes sociales corporativas de tu empresa te representan? Tal vez sí, pero lo más seguro es que tu respuesta sea negativa. Que todos tengan por bandera los colores de la empresa en la que se trabaja es difícil, pero todavía más complicado es que los empleados sean tus seguidores también en las redes sociales.

Lo cierto es que cada vez más compañías apuestan por el employer branding, una cuestión ya muy vigente en Estados Unidos. Y para afianzarlo, las redes sociales pueden ser la puerta de entrada. Es lo que se conoce como social employee advocacy o, lo que es lo mismo, que tus propios empleados sean tus mayores abanderados en los canales sociales corporativos.

Pero ¿qué hacer para involucrar a los trabajadores en las redes sociales corporativas? ¿Cómo convertirlos en los verdaderos embajadores de tu marca? Conseguir que sean tus prescriptores son palabras mayores, es lo más difícil y lo que más sentido tiene al mismo tiempo. Aunque nunca se puede obligar a que sean tus ‘mayores fans’, una buena gestión social media puede involucrar a la plantilla para que forme parte de la comunidad de seguidores. “Es vital para todos los empleados conocer qué información se transmite y cómo es la manera de transmitirla”, afirma Javier Fernández, responsable de comunicación de Kschool.  

Ahora bien, las redes sociales pueden ser muy positivas, pero también entrañan sus riesgos. El buen o mal uso que hagamos de ellas pueden dañar o mejorar la reputación corporativa de la empresa. Incluso hay empresas que cuentan con códigos internos para guiar el manejo en estos canales por parte de la plantilla. En este sentido, según Fernández, “es importante que los empleados sepan identificar el tono de la comunicación de la empresa de cara al exterior. Que sean capaces de reconocer el mensaje, la voz y la forma en que la compañía se comunica”.

Ganar clientes, mejorar el posicionamiento de marca o ampliar el compromiso de los trabajadores son algunos de los objetivos de los empresarios a la hora de establecer un plan de acción relacionado con la presencia en redes sociales de su plantilla. Lo cierto es que las publicaciones que provienen de los empleados generan ocho veces más participación en redes sociales que las corporativas de una empresa, según datos de Cisco.

“Concienciar en el buen uso de las redes sociales como instrumento de comunicación empresarial es positivo tanto para la empresa, que conseguirá un aumento de interacciones y publicaciones de sus propios empleados, como para los mismos trabajadores, que se involucrarán aún más”, apunta este experto en redes sociales.

LOS TRABAJADORES COMO EMBAJADORES DE MARCA

Según se desprende del Edelman Trust Barometer de 2019, un 61% de los empleados encuestados consideran creíble o muy creíble lo que dice una persona como tú, un 53% confía en un empresario de éxito y un 47% en el CEO. Además, para el 78% de los encuestados, cómo trata una empresa a sus empleados es uno de los mejores indicadores de su nivel para confiar en ella, de ahí la importancia del bienestar de los trabajadores.

En este sentido, el 67% está de acuerdo en que la reputación puede conseguir que prueben un producto, pero si no hay un nivel de confianza suficiente en dicha empresa, dejarán de comprarlo. Al final, todo repercutirá no solo dentro de la compañía, sino también hacia fuera.

Para involucrar a los trabajadores en el uso de las redes sociales, estos tienen que ver que su actividad en ellas tiene relevancia, apunta Fernández, al tiempo que añade: “Todo esto se consigue creando un ambiente laboral distendido en el que las líneas jerárquicas se difuminan. A todo el mundo le gusta ser protagonista por un día y si ven que su foto, su tweet o su mención está en ‘primera plana’ de las redes sociales de la compañía, casi con toda seguridad repetirán este gesto”.

Lo que sí es verdad es que si tus empleados no son tus mayores fans, tienes un problema. Para hacer comunidad fuera, lo primero que hay que hacer es crear comunidad dentro.