Apostar por el talento interno para no perder la estela digital: caso Repsol

Las competencias digitales han ganado en protagonismo con la pandemia. Si en los meses previos a la COVID, empresas y trabajadores tenían entre su lista de prioridades la transformación digital, los cambios impuestos por la nueva situación han hecho que ascienda en muchos casos al primer puesto. 

En esta adaptación, una de las consecuencias más claras ha sido la necesidad de contar con profesionales preparados tecnológicamente. Esto se está llevando a cabo por una parte, con la búsqueda y contratación de talento y, por otra, con la revisión de las habilidades de la propia plantilla. Los procesos de optimización de los empleados en su actual desempeño (upskilling) y de reciclaje para nuevos puestos (reskilling) se han impuesto, especialmente en grandes empresas con algo de músculo presupuestario. 

“Estamos formando a más de 20 compañías este año, muchas del Ibex 35”, afirma Rodrigo Miranda, director general de la escuela de negocios ISDI, especializada en digitalización. El cambio se ha visto reflejado, fundamentalmente, en la adopción de una metodología 100% a distancia, a la que antes muchas organizaciones eran reticentes. “Ha habido un trasvase de un 15% de formación en empresas online a un 60-65% de formación online en los últimos seis meses en septiembre”, subraya. 

Formación especializada

Repsol es una de estas empresas españolas cotizadas que arranca en este 2021 su iniciativa para poner a punto las competencias digitales de su empleados. En este planteamiento se enmarca el acuerdo firmado con ISDI para impartir a entre 800 y 1.200 trabajadores de todo el mundo un programa formativo centrado en desarrollar sus capacidades analíticas. Estará en marcha durante los próximos tres años, con entre 80 y 100 horas de formación, con el reto de que al finalizar, los empleados se hayan actualizado y familiarizado con las áreas que componen el campo del dato y la Inteligencia Artificial.

Según explica Joaquín Hormaechea, director de Talento y Cultura de la compañía energética, este itinerario de aprendizaje, que forma parte del programa Repsol Data School, “ayudará a los distintos negocios y áreas corporativas” de la empresa “para la toma de decisiones”. De acuerdo con este directivo, la apuesta por el talento interno es clave en la propia transformación de la compañía. “Queremos impulsarlo (el programa de formación) como parte de la cultura corporativa, crear una nueva generación del dato dónde edad, estudios… no influyan. El gran objetivo es reforzar las competencias digitales”, añade. 

Para ello, parten de la estructura del máster de Data Analytics de ISDI, fundamentada en la cultura y gestión del dato, la analítica avanzada, inteligencia artificial, business intelligence y visualización. Y lo que han hecho ha sido particularizarlo a medida del sector y a los equipos de la compañía en función de varios factores clave. Para empezar, preparando una formación “masiva, global y acelerada”, detalla Rodrigo Miranda. 

El segundo punto es que sea “muy práctica”, innovadora y disruptiva: “En el caso de Repsol, hemos diseñado casos prácticos basados en retos de negocio de la propia compañía. Los alumnos tienen que aprender de data e implementarlo en casos prácticos que van a llevar a cabo con nuestros tutores”, define el director general de ISDI. 

Por último, además de en el conocimiento impartido se incide también en “la forma de hacerlo”. En este caso, se aplica metodología agile en las formaciones: se gestionan en sprints y usan herramientas como Trello o Slack “que ayudan a la compañía a ser competitiva”, apunta Miranda.

Impacto en el plan de negocio

Desde Repsol destacan el papel “crucial” que juega la digitalización dentro de su Plan Estratégico 2021-2025. “Para poder llevarlo a cabo, tiene que haber una evolución en la cultura corporativa, que impulsen los líderes y adopten todos los empleados de forma progresiva”, señala Enrique Fernández Puertas, director de Arquitectura y Digitalización de Repsol. Y, según asegura, el centro de la estrategia lo ocupa el trabajador: “En todos los casos nuestro principal objetivo es el desarrollo de las personas. La tecnología debe ponerse al servicio del empleado para que pueda seguir creciendo profesionalmente, desarrollándose y evolucionando sus capacidades”.

En este Plan Estratégico, Repsol prevé un impacto positivo de los proyectos de digitalización de más de 800 millones de euros anuales en 2022, con un grado de inversión anual de alrededor de 150 millones de euros. “Lo haremos: optimizando las operaciones, abriendo nuevos modelos de negocio que aporten más valor a nuestros clientes y aumentando la eficiencia de las funciones de soporte”, indica Fernández Puertas. 

El Programa de Digitalización se puso en marcha en 2018 y ya cuenta con más de 240 iniciativas digitales en marcha. En el caso de Repsol Data School, además del itinerario de formación intensivo que se inicia este año, ha lanzado un conjunto de cursos cortos disponibles en la plataforma digital de la compañía.