Teletrabajo: ¿es viable conseguir un ascenso? Claves para lograrlo

El panorama laboral que ha dejado la pandemia del coronavirus está repleto de incertidumbre y dudas. Al aumento sin paliativos del desempleo, que se espera aún más acusado en los próximos meses, se suma el nerviosismo de quienes aún conservan el trabajo.

Incluso, aquellos empleados que tenían entre sus aspiraciones laborales conseguir un ascenso en sus empresas han visto peligrar sus planes, en buena medida por la implantación masiva, y en muchas ocasiones obligatoria, del teletrabajo.

¿Tengo las mismas opciones de ascender?

Así, con un gran porcentaje de la población trabajando desde casa, se nos plantea la cuestión de si existen realmente las mismas opciones de ascender dentro de una compañía mientras se trabaja en remoto. Para desvelar esta incógnita hemos recurrido a algunos de los protagonistas del sector.

En opinión de Víctor Espinosa, director de Desarrollo Corporativo de Nexian, desde luego que existen las mismas opciones, “pero es necesario conocer las claves para lograrlo”. En primer lugar, según nos cuenta, lo primero que debería conocer todo trabajador, opere en remoto o no, son “las motivaciones más habituales de las empresas” a la hora de ascender a una persona u otra. Generalmente, un mayor nivel de compromiso, unos mejores resultados en su trabajo y la capacidad de impulsar o liderar un proyecto son determinantes. Por ello, atendiendo a estos principios generales, “todo empleado debería tener oportunidades de ascender en una empresa”, expone Espinosa.

Esta visión, en líneas generales, es la que defiende también Rosario Sierra, directora de Negocio Corporativo de LinkedIn. En su opinión, la pandemia del Covid-19 ha dado lugar a un distanciamiento social que ha cambiado muchos aspectos de nuestra vida personal y laboral. Sin embargo, “creemos que ello no ha afectado a la posibilidad de los trabajadores de ascender en una empresa, sino que se abren posibilidades que hasta ahora no existían con tanta frecuencia”, sostiene. En palabras de Sierra, si bien es cierto que el teletrabajo hace que nos planteemos temas como el de la productividad, también lo es que permite que se abran “oportunidades para la fuerza laboral que compone la empresa, como por ejemplo la posibilidad de ascender en localizaciones que hasta ahora no se planteaban”.

Esta podría ser la parte más pragmática del debate, pero no podemos olvidar lo que dice la legislación respecto al tema que estamos abordando. De hecho, es donde pone el foco Javier Blasco, director de The Adecco Group Institute: “El artículo 13 del Estatuto de los Trabajadores, que regula el trabajo a distancia, ya recoge que los trabajadores a distancia tendrán los mismos derechos que los que prestan sus servicios en el centro de trabajo de la empresa”. Esto, como apunta el portavoz, debería materializarse a través del establecimiento por parte del empresario de “los medios necesarios para asegurar el acceso efectivo de los trabajadores a la formación profesional para el empleo, a fin de favorecer su promoción profesional”, con la obligación de informar a los empleados en remoto de la existencia de las vacantes existentes en sus centros de trabajo. Algo que, según añade Blasco, ya estaba redactado en el artículo 9 del actual Anteproyecto de Ley de Trabajo a Distancia.

Claves para lanzarse a por ello

Llegados a este punto, puede resultar interesante analizar cuáles son las claves que habría que afinar para maximizar las posibilidades de escalar en una compañía en épocas de teletrabajo.

En este sentido, Blasco subraya que “son las tradicionales en la promoción profesional: competencia y motivación”. Para entrenar la primera de las claves, según el experto, hay que entrenar más que nunca los conocimientos, dentro de nuestra área de especialización, “que nos permitan estar en la pole”, conocimientos adaptados al entorno digital, entornos de internacionalización, y otros cambios de escenarios, “incluso preparándonos para salir de nuestra “zona de confort” y adentrarnos en nuevas cualificaciones”. Del mismo modo, no podemos obviar que hoy muchas de las competencias se han visto adaptadas al teletrabajo: “versatilidad y polivalencia, habilidades de comunicación, toma de decisiones o capacidad de trabajo en equipos ágiles y diversos”. 

En lo que respecta a la motivación, Blasco aconseja ser proactivo en la búsqueda de la promoción interna, así como desarrollar nuestro perfil de intraemprendedores, ya que hoy se demandan managers que no solo gestionen personas, lo cual cada vez se relativiza más, sino que estén “muy orientados a los clientes y a la cuenta de resultados, a los objetivos globales de la compañía”, precisa.

Espinosa, por su parte, sin restar importancia a las cualidades personales y profesionales, advierte que “las empresas a partir de ahora seleccionarán a los candidatos y ascenderán a su personal en función de sus habilidades digitales, cuanto más específicas, mejor”. Y es que, en su opinión, la transformación digital en las empresas es impostergable, por lo que “la selección debe ser coherente con esta cuestión para lograr eficacia, productividad y resultados”. Una importancia de todo lo relacionado con el ámbito digital que para Sierra es evidente: “El teletrabajo ha supuesto un cambio en la cultura de las empresas, que han tenido que replantearse en qué lugar se encuentran en la carrera de la digitalización”, teniendo que adaptarse a las nuevas herramientas asociadas a este nuevo escenario, al igual que los trabajadores.

En definitiva, la posibilidad de promoción dentro de una empresa podríamos decir que ha cambiado de la misma manera que lo ha hecho la forma en que trabajamos, por lo que, como concluye la portavoz de LinkedIn, “es fundamental trabajar en nuestra imagen digital y demostrar que nuestro papel en la empresa y en nuestros equipos es importante para el crecimiento de la empresa y más importante para el nuestro propio”.