¿Cuándo invertir o no? Consejos para los momentos más convulsos

Mover nuestros ahorros es una máxima que siempre hemos escuchado y el principal consejo por parte de los asesores patrimoniales. En este sentido, una de las dudas que suele aparecer es cómo debemos actuar en el caso de que nos encontremos ante un panorama incierto. ¿Esperamos o invertimos?

En opinión de Rafael Ojeda, si estamos con dinero y queremos entrar en un mercado convulso lo mejor “es estar lejos”. La liquidez, a su modo de ver, “es muy importante” y en un momento de incertidumbre es preferible “mantenerse al margen”. Y es que ya tendremos tiempo de apostar cuando lo veamos más claro o creamos que la bolsa “es más propicia para tener más opciones de que la inversión realmente rentable”. 

Cuando hay volatilidad podemos tanto acertar como equivocarnos. Ésta, añade Ojeda, “es nuestra amiga”, pero también nos puede costar “mucho dinero”. Por eso, hay que ir con pies de plomo cuando estamos gestionando nuestro dinero. 

¿Cómo detectamos el instante en el que no hay que invertir? Desde el punto de vista de José Luis Cárpatos, director de inversiones de Gloversia Eafi, la mejor manera de no estar en los momentos peores es “usar la media de 10 meses del S&P 500”, que es el índice de referencia para los inversores en la bolsa de Estados Unidos. 

En este sentido, cuando un cierre mensual se da por debajo de la media “está demostrado históricamente que uno se ahorra muchos sustos”, concreta Cárpatos. Por ejemplo, de seguir esta mecánica, no se habría incurrido en pérdidas “ni en las grandes caídas del 2000 ni tampoco en las del 2018”.

Ojeda expone que “la tendencia es tu amiga”. Hay que tener muy claro que “ser valiente no salga tan caro y que ser cobarde no merezca la pena”. Eso sí, hay instantes en los que es mejor estar fuera y esperar a que el mercado nos “dé señales para poder entrar de nuevo”, alerta. 

En la actualidad, en un momento de final de ciclo, con noticias que distorsionan el escenario como el Brexit, hay que tener mucha prudencia porque podemos perder en dos días lo que hemos ganado en un año. Es recomendable “tener cuidado y ver cuándo hay una clara tendencia para subirnos al barco”.  

Tipo de inversiones

En el caso de que tengamos que invertir porque no nos queda otra o estamos ya dentro del mercado valores refugio como el oro, tal y como destaca Ojeda, en un momento convulso puede ser “un activo en el que entrar”. No tanto porque veamos claro que vaya a subir sino porque estadísticamente, y porque ha pasado durante décadas, “cuando se ha producido un momento de inestabilidad en los mercados el metal dorado se ha comportado bien”. 

Por tanto, es más probable que tenga un buen desempeño en este escenario que otros valores. Así, invertir en materias primas puede ser “un buen referente”, agrega. Si no, invertir en renta fija que nos pueda ofrecer “una rentabilidad positiva”. 

Una de las opciones que descartan, a groso modo, los dos expertos es la de invertir en acciones de la bolsa (renta variable), puesto que “en momentos más agitado es complicado”. Hay que ser más selectivos para ver claramente por “qué tipo de compañías hay que apostar para poder ser rentable”, apuntan. 

Hablando de qué tipo de inversiones hipotéticas se podrían hacer ante un clima como el actual Ojeda resala que quizá sea una buena opción “invertir en socimis”. Recientemente, llegaron a sus niveles mínimos de las últimas 52 semanas en los mercados y entrar ahora mismo en estos precios puede “ser muy interesante porque nos ofrece una rentabilidad por dividendo bastante interesante, entre un 6% y un 7%, dependiendo de la empresa”. Estos valores no cree que tengan una caída semejante al dividendo que nos van a dar, por lo que es una manera de “tener la cartera plana y no perder dinero”.

A modo de resumen es posible que lo más aconsejable sea “tener una mezcla” que nos sirva como protección: parte en oro, parte en socimis, en empresas con buenos dividendos en compañías muy reguladas como Endesa y mantenernos alejados de compañías con mucha volatilidad o que por cotizaciones estén muy caras, señalan los expertos.