Roaming: cómo evitar sustos en la tarifa de móvil si viajas fuera de la UE

Cuando decidimos salir de nuestro país y pasar las vacaciones en el extranjero hay que tener en cuenta varios aspectos, entre ellos, uno de los más importantes es saber si nos pasará factura el uso del teléfono móvil. Pero la buena noticia es que viajar por la Unión Europea no nos supondrá un sobrecoste a la hora de utilizar el smartphone. 

Desde junio de 2017, el roaming ya no existe dentro de la Unión Europea, es decir, si utilizamos el móvil para realizar llamadas o navegar por internet con otro operador que no sea el nuestro de origen no tendremos que sufrir ningún sobrecoste dentro de este territorio. Aunque fuera de la Unión Europea sí que sigue existiendo el roaming o la itinerancia internacional. 

¿Por qué es tan difícil cambiar de compañía de teléfono?

Una vez que llegues al país de destino, ya sea dentro o fuera de la Unión Europea, tu operadora deberá informarte del coste del megabyte mediante un correo electrónico, SMS o una ventana emergente, además de la información sobre las tarifas. Esto es una acción obligatoria.

Para llamadas, SMS, MMS y servicio de datos, los precios máximos están estipulados dentro de la Unión Europea. Por ejemplo, los límites para Internet que se aplican por defecto son 50 euros sin IVA o 60,50 euros con IVA, excepto si el cliente escoge un límite más elevado, y las compañías de telecomunicaciones deben informar a los clientes cuando hayan alcanzado el 80% del límite. 

CASOS ESPECIALES

Por una parte, aquellos usuarios que tienen móviles prepago sólo pueden utilizar el saldo que tengan disponible en el extranjero. “Para el uso de datos, podrán usar el crédito restante al precio límite del mercado mayorista”, señalan fuentes de FACUA a BYZness.

Por otra parte, esta organización de consumidores recuerda que aquellos que cuentan con un plan de datos ilimitados, sí que tendrán limitados su uso en el extranjero. “Tan sólo podrán disponer del doble de los datos que incluye el precio de su plan a precio de mayorista”, indican. 

Otra de las cuestiones sobre las que informa FACUA es la establecida para aquellos casos en los que los viajeros pasen más tiempo fuera que dentro de su país. En estas situaciones, la compañía de telecomunicaciones puede establecer un tiempo de cuatro meses para comprobarlo y, en caso afirmativo, deberá darle un aviso al cliente, quien cuenta con dos semanas para dar explicaciones. En caso de no hacerlo, la compañía podrá establecer un recargo. 

¿QUÉ HACER SI NOS FACTURAN DE MÁS?

También hay momentos en los que nos puede llegar un susto en modo de factura. Existe la posibilidad de que nos cobren más de lo establecido, pero siempre y cuando los clientes hayan autorizado de forma expresa que quieren continuar con los servicios de roaming una vez llegado al tope o en el caso de que los usuarios hayan establecido un límite superior al habitual. 

No obstante, en aquellos casos en los que nos facturen de más, debemos interponer una reclamación ante la autoridad de Consumo de la comunidad autónoma que corresponda, de forma directa en sus oficinas o a través de asociaciones de consumidores como FACUA.