Por una política agrícola más justa

Una nueva Política Agrícola Común entrará en vigor a partir de 2021. En este proceso y ante la expectativa, diversas organizaciones pugnan por la construcción de una PAC más justa para quienes se sustentan del mundo rural. La PAC cuenta con cerca de 60.000 millones de euros anuales, casi un 40% de los fondos de la Unión Europea.

La Coalición Por Otra PAC aúna a 37 organizaciones medioambientales, de cooperación, de consumidores, asociaciones de ganaderos, productores, empresas... que pretenden que la nueva PAC sea más justa, saludable, respetuosa con el medio ambiente y apueste más por un desarrollo sostenible.

Agricultura doméstica: plantar en casa lo que comes

Por ello, a través del Atlas europeo de la PAC, que busca ayudar a comprender los pilares de la Política Agrícola Común, muestra propuestas para mejorar en cuanto a financiación, agricultura ecológica, salud, clima, alimentación o financiación se refiere, e incluye medidas para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. En concreto, está elaborado por la Fundación Heinrich-Böll y SEO/ BirdLife.

En este Atlas se detalla cuáles son las bases de financiación de la PAC: en primer lugar, los pagos a los agricultores según sus superficies y, en segundo lugar, el apoyo al desarrollo rural, buscando promover buenas prácticas; al mismo tiempo que realiza un repaso a los aspectos principales sobre los que se sustenta la Política Agrícola Común y los puntos de mejora en consecuencia. En este sentido, el documento habla sobre 20 prioridades específicas entre las que se encuentran la biodiversidad, las explotaciones agrarias, el bienestar animal, la propiedad de la tierra, el empleo, el agua, el abuso de fertilizantes, la agricultura ecológica, la salud, la alimentación, el clima y el comercio internacional.

PROPUESTAS DE MEJORA DEL ATLAS DE LA PAC

Aunque hay más propuestas de mejora que parten de la Coalición, hemos escogido los siguientes cinco puntos en concreto para entender cuáles son algunas de las prioridades en la mejora de la nueva PAC:

1. La economía de escala también afecta a la agricultura. En lo que respecta a las explotaciones agrarias, un agricultor recibirá más dinero cuanta más tierra tenga. Las empresas familiares pequeñas, aunque siguen siendo mayoría, están disminuyendo. Las explotaciones grandes, por su parte, traen consigo una pérdida de la diversidad de los productos agrícolas y el incremento de prácticas intensivas. El Atlas busca girar las políticas a favor de explotaciones más pequeñas que respeten el medio ambiente.
2. Garantizar unas condiciones dignas de trabajo. En cuanto al empleo se refiere, en el citado documento se explica que no existen prácticas que se deban seguir en cuestión de normas laborales para optar a las ayudas de la PAC, algo que sí ocurre en el ámbito ambiental. Por ello, aboga por la formación de los trabajadores, salarios adecuados y unas condiciones laborales dignas.
3. La PAC apuesta por conservar la naturaleza y la biodiversidad, pero cada vez se produce una intensificación mayor. Y es que la agricultura es una de las mayores amenazas para la biodiversidad, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. Por ello, la Coalición Por Otra PAC reivindica una agricultura sostenible, a través de una financiación y normas que potencien la protección de la biodiversidad.
4. Otra de las cuestiones que plantea el documento es el bienestar animal. Nos vienen muchas veces a la cabeza las imágenes de las granjas de animales en las que se encuentran hacinados, y al mismo tiempo la mayoría de los ciudadanos europeos considera que se deberían mejorar las condiciones de los animales en la producción ganadera. No obstante, en la actualidad no hay una propuesta económica ante este reto.
5. Producción sostenible y consumo sostenible van de la mano. En lo que respecta a la salud, un factor que preocupa en gran medida a la población europea, la nueva PAC incluye este ámbito como uno de sus fines, pero para hacerlo, la Coalición demanda que se centre en la financiación de productos sanos y sostenibles, aunque sostiene que la transición hacia un sistema alimentario mejor no depende únicamente de la política agraria.