Los que dejan huella

Rocío Hervella (Prosol): "Hay escasez de contenedores y los fletes cuestan diez veces más"

La fundadora y CEO de Prosol asegura que el café "es la segunda commodity, después del petróleo, que más papel mueve y con la que más se especula"

Rocío Hervella, fundadora y CEO de Prosol

Rocío Hervella, fundadora y CEO de Prosol / activos

Armando Huerta

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Al frente de una empresa que fabrica 13 millones de tazas de café al día y que desde Venta de Baños exporta a 30 países, Hervella denuncia que ahora la materia prima es más escasa, ha subido su precio y han crecido los costes logísticos y energéticos.

Al sector agroalimentario no le fue mal en lo peor de la pandemia...

En el primer semestre del año pasado crecieron las ventas -casi se duplicaron- por el pánico generalizado de la población, que no sabía qué iba a pasar. Había incertidumbre. Pero en el segundo semestre las ventas se fueron estabilizando en los niveles del año anterior.

¿No les perjudicó la caída en la hostelería?

En hostelería se perdió en España en 2020 un 50% del volumen. Pero Prosol solo tiene un 5% de su negocio orientado a hostelería. El 95% se dirige a consumo en el hogar. En 2021 la hostelería ha recuperado volúmenes más normales.

Creció el consumo en el hogar...

Sí. Ha habido un cierto incremento del consumo de café en el hogar, en torno al 5%, que debería haberse traducido en una mayor venta, pero como ha habido costes mucho más elevados, el beneficio ha sido menor.

Esta entrevista forma parte de la serie ‘Los que dejan huella’, un proyecto conjunto de Prensa Ibérica y KPMG para dar a conocer las opiniones de destacados empresarios familiares del país y que culminará con la publicación de un libro.

Más ventas, pero más costes.

Este año hay una expansión de los costes y, por tanto, una tensión muy fuerte en los márgenes.

Les cuesta mucho más caro importar el café...

Ha habido un mayor aumento de productos en determinados países. Brasil, por ejemplo, produce el 40% del café mundial, y Vietnam, el 25%. ¿Qué está pasando? Que los contenedores que salen de estos países, sobre todo de Vietnam, van cargados de otros productos y para traer materias primas hay que pagar mucho más caro. Se ha multiplicado por 10 el coste de los fletes.

Encarecimiento y, además, escasez de contenedores, ¿no?

Sí. Hay menos disponibilidad de fletes, de contenedores. Y la disponibilidad no es cuando tú quieres, lo que te obliga a tener un estocaje mayor y tienes que habilitar espacios, que es otro aspecto que nos falta en España, una gestión logística integrada y eficiente.

"Somos la única empresa de capital español que se dedica al café soluble"

Y luego está la tarifa de la electricidad, que también ha subido.

Sí. Primero, los fletes. Segundo, menor producción y disponibilidad de café. Países como los de Centroamérica están sufriendo más fuerte el covid, tienen menos medios y recogen menos café. Tercero, la moneda. El café cotiza en dólares. Es la segunda commodity, después del petróleo, que más papel mueve y con la que más se especula. El precio de la materia prima está subiendo porque el dólar está fortalecido. Y luego, tienes los costes inherentes a la logística y los energéticos con un incremento de tarifa que a nos afecta directamente porque somos una empresa intensiva en consumo de energía. Nuestra maquinaria funciona 24 horas, 7 días a la semana.

Y entiendo que ustedes repercuten en el precio estos costes.

Todos estos factores se traducen en un incremento que tiene que ser repercutido al mercado porque, indudablemente, ha supuesto un incremento de más de 50 céntimos en un producto que en los mercados se vende por dos euros un frasco para 100 tazas de café. Con esto te doy la dimensión...

¿Crece o desciende el consumo de café en los últimos años?

Se ha mantenido. Lo que ha habido es un cambio de tendencia. Un 15% de los consumidores de café molido se han pasado a las cápsulas en los últimos 15 años. Nosotros, en 2012, entramos en el mundo de las cápsulas porque pensamos que era una gran oportunidad.

Comenzaron con soluble y son un auténtico referente en esta línea.

Nosotros nacimos como empresa de café soluble hace 23 años, que es un sector que está muy concentrado. Sólo hay cinco empresas en Europa y menos de 40 en el mundo. 

¿Sólo cinco en Europa?

Sólo cinco, sí. Y dos de ellas son grandísimas multinacionales, las dos más grandes a nivel mundial. Luego, las otras tres nos dedicamos a marca privada.

"Trabajamos con los principales distribuidores de Europa"

O sea, que son la única empresa española que se dedica al soluble.

Sí. La única empresa de capital español que fabrica café soluble. El peso más relevante que tenemos en nuestra cuenta de resultados es de soluble. En todo el sur de Europa somos líderes en marca privada. O sea, sumando todas las marcas de supermercados y tostadores a los que vendemos, tenemos el mayor volumen de kilos en muchos países de Europa y del norte de África.

Y quieren crecer en el segmento del café tostado. Este año han comprado el 21% de Supracafé.

Tenemos un 80% del negocio en soluble, un 15% en cápsulas, y un 5% en café tostado, que es una actividad nueva en la que hemos entrado con una posición del 21% en una marca, Supracafé, que está muy centrada en el mercado de Madrid y en muchas empresas que se preocupan por la cadena integral del café desde la comunidad cafetalera -tenemos fincas en Colombia- hasta el cliente final.

Usted no habla de marcas blancas sino de marcas privadas...

A mí me gusta más hablar de marca privada porque no sólo haces marcas blancas, que la gente relaciona con los supermercados, sino también café para grandes marcas como, por ejemplo, Santiveri en España. Ellos no compran el café, compran cereales solubles que nosotros procesamos. Pero Santiveri no es un marca blanca. Así tenemos muchos clientes a nivel mundial. Smucker, por ejemplo, que vende con su marca Folgers en EE UU, pero el café es nuestro. La gente no sabe de dónde viene ese café, pero ese café viene de aquí. 

Entiendo que son clientes Aldi, Lidl, Carrefour, Mercadona...

Trabajamos con los principales distribuidores que están presentes en toda Europa -los top-5 son clientes nuestros-, y en los distintos países trabajamos con unos o con otros. Estamos presentes en el 90% de las marcas privadas que tienen el liderazgo en café.

Fabrican 13 millones de tazas de café al día que llevan a 30 países. ¿Qué peso tiene la exportación en el volumen de negocio de Prosol?

Esta es una empresa que nació 100% internacional. Hoy dos tercios de nuestro negocio es internacional y un tercio es mercado español.

El BEI va a apoyar con financiación sus planes de innovación... 

El BEI apuesta por Prosol porque hay nuestro compromiso con la innovación. Estamos invirtiendo mucho en digitalización, en la formación de nuestros profesionales y en sostenibilidad. En cápsulas, por ejemplo, lanzamos la cápsula compostable al 100% el año pasado y acabamos de anunciar una cápsula, home compostable, cuyos materiales son orgánicos y se deshacen en un período muy corto de tiempo garantizando la calidad del café.

Economía circular...

Proteger el medio ambiente no es una obligación, es una responsabilidad. Prosol fue la primera empresa en ser certificada con residuo cero en el sector agroalimentario. Valorizamos más de un 95% de los residuos que producimos.

Otro asunto de responsabilidad social. ¿Cómo se puede favorecer la igualdad en las empresas?

La clave es la conciliación. No hay que decidir entre familia y carrera. La tasa de fecundidad en España es muy baja y el reto es facilitar que se tengan más hijos. En Prosol nos preocupa que nuestros profesionales puedan cuidar de sus hijos y sus padres. Tenemos más de 55 medidas de conciliación y han sido ampliadas con la firma del último convenio el mes pasado.

Quiero ser abogada

La muerte de su padre cuando ella tenía 5 años marcó su vida y la de sus cuatro hermanas. Su madre, viuda con menos de 30 años, se volcó en darles la mejor formación. Rocío, que siempre fue estudiosa, aprovechó el tiempo y se formó en idiomas, un aprendizaje que resultaría después esencial en su desarrollo profesional, marcado por una visión muy internacional.

Idealizó a su padre, que era abogado, y en su adolescencia, cuando le preguntaban, decía que quería ser abogada. Después, descubrió su vocación: el mundo de la empresa.

En lo personal, le apasiona conversar con los jóvenes: sus hijos (tiene dos, de 17 y 20 años), sus sobrinos. "Aprendo muchísimo" con ellos, dice. 

Rocío es también deportista. Pasea, nada y le encanta el esquí. Su viaje a la nieve una semana al año con su familia es sagrado en el calendario. Ya no sale a correr porque tuvo una lesión en la cadera, pero antes hacía maratones y media maratones. "Me gustaba este tipo de retos y necesito también quemar adrenalina", confiesa. 

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