Cinco consejos para implantar la Inteligencia Artificial en tu empresa

Un 65% de empresas españolas responde “sí” a la pregunta ¿cuenta su organización con planes o proyectos pilotos sobre tecnologías de Inteligencia Artificial? En cambio, cuando hablamos de implementar esta tecnología en una fase más avanzada, sólo un 20% asegura que lo ha hecho, frente al 32% de las europeas. Así se desprende de un estudio de Microsoft y EY, que analiza la adopción de este tipo de tecnologías en el mundo empresarial.  

Estos datos reflejan la necesidad de nuestro país en profundizar en la adopción de Inteligencia Artificial (IA). Si todavía no tienes claro cómo hacerlo, aquí te lanzamos cinco consejos prácticos:

• Priorización y estrategia

El primer paso es decidir dónde se van a aplicar estas soluciones y definir su alcance. Inmediatamente después, se recomienda establecer cuáles van a ser las necesidades de negocio específicas en cada área, como por ejemplo, la experiencia de cliente, la optimización de operaciones, la gestión del talento o la transformación de productos y servicios.   

• Liderazgo desde arriba

“Es necesario contar con el soporte de la dirección de la empresa”, asegura David Carmona, director general de Desarrollo de Negocio en IA de Microsoft.  Pero además, tal y como señala Pilar López, presidenta de la corporación en nuestro país, “hay que involucrar a todos los empleados”. Y precisamente por eso, es clave que la IA sea lo más accesible posible para poder llegar así a todos los trabajadores, no sólo al personal técnico. Del mismo modo, para que esto sea posible es fundamental la formación.

• Contar con las capacidades necesarias

Para Juana Fernández, directora del Centro de Inteligencia Artificial y Análisis de Datos de EY, hay que tener dos tipos de capacidades, las tecnológicas y las humanas. En el primer caso, es vital establecer cómo se van a gestionar los datos, quién será tu socio para llevar a cabo esta implantación y ser capaz de adquirir tecnologías emergentes. En el caso de las capacidades humanas, Fernández destaca el liderazgo, la interacción o tener una cultura abierta.

• Generar confianza en la IA

Para alcanzar el cambio cultural necesario para la adopción total de esta tecnología, es clave desarrollarla desde un diseño ético que garantice la seguridad, la privacidad, y la imparcialidad, lo que incluye tener el control de los datos.

• Definir una estrategia de datos

“La Inteligencia Artificial va a ser buena o mala según los datos, por eso hay que tener una buena estrategia en torno a cómo los gestionamos”, explica López, que añade que esto mismo es una garantía para que esta tecnología genere valor en la estrategia de negocio.

Retos todavía por delante

Compañías tanto europeas como españolas ven numerosos beneficios en este tipo de soluciones. De este modo, el 90% cree que la IA les puede ayudar a optimizar sus operaciones. Otras ventajas que valoran son la posibilidad de conectar mejor con los clientes, lo que permitiría, por ejemplo, recortar los tiempos de resolución de conflictos, contar con empleados más eficientes o transformar los productos y servicios de la empresa.

En cambio, para que todo esto sea posible todavía quedan varios retos por solventar cómo “establecer una regulación para aplicar su uso, ser capaces de trabajar con grandes volúmenes de datos y gestionar el impacto en los empleados”, concluye Fernández.