'Pá-ga-me': Patricia Conde habla sobre sus problemas con Hacienda

No es Cristiano Ronaldo el único que tiene cuentas pendientes con Hacienda, la presentadora Patricia Conde también tiene problemillas, y harta de que se hable sobre ello, ha decidido poner punto y final y contar su verdad. Para ello ha tirado por el camino fácil, el que lleva a Roma y a todos lados: Instagram. Así se segura de que llega a todos los oídos la información correcta. Ha sido muy directa y ha explicado la deuda de 1,8 millones de euros que tiene.

"Nunca me gustaron aquellos que ven cómo están apedreando a alguien y se unen a tal masacre sin preguntar", comienza. "Respecto al último listado de Hacienda para público escarnio de los que no saben o no quieren distinguir a un defraudador de uno que se defiende del abuso de Hacienda os diré que la Agencia tributaria pierde más del 51% de las causas en los tribunales, pero, al fin y a la postre, arruinan lo q has construido. A mí todavía no me ha juzgado nadie".

Esta es la foto que ha elegido para explicarse, que bien podría haber sido cualquier otra porque no tiene nada que ver con el texto que escribe a continuación. "Todas las actas están pendientes de sentencia y tendrá que ser el tribunal superior de justicia quien me diga si debo pagar o no." Un texto más largo que un día sin pan donde deja claro que ella es una tía legal pero que si hay que pagar, pues se paga.

"Afortunadamente me gano muy bien la vida y Jamás he dejado ni un céntimo de euro sin declarar. La razón de todo esto entiende que en un determinado momento, q se remonta a más de diez años, tributé con arreglo a un criterio que no comparte, sin perjuicio de que en todas sus actuaciones reconozca que declaré todos mis ingresos SIEMPRE. " Nos queda claro, Pati.

Con lo que es ella, nunca la habíamos visto tan seria y ha terminado su texto así: "Todo está en manos de mis abogados, así que...ahora si me disculpan, tengo mucho trabajo. Gracias." Ea.

La presentadora ha sido clara y con ello quiere poner fin a todo este qué dirán. Ya sabes Paty, las cosas claras y el chocolate espeso.