María Castro y sus miedos a someterse a una cesárea

Hablemos, amigas.

María Castro y su marido en las puertas del hospital con su segunda hija
María Castro y su marido en las puertas del hospital con su segunda hija / GTRES

María Castro y José Manuel Villalba se convirtieron recientemente en padres de su segunda hija, una niña llamada Olivia. Una noticia de la que nos enteramos porque fue la propia actriz quien decidió realizarse una fotografía entrando en el hospital junto a su marido. Ahora, y tan solo dos días más tarde, María se ha lanzado a escribir y a compartir con nosotros todos los sentimientos y emociones que está atravesando en la que es su segunda maternidad.

"Ha vuelto a ocurrir la MAGIA… la magia de la vida. Cuando creías que lo habías experimentado todo, cuando pensabas que no se podía igualar ese amor tan puro, cuando te parecía imposible vivir en tus propias carnes otro día tan especial como el de hace cuatro años... entonces, llegas tú, Olivia, y tiras por tierra todas nuestras teorías y sentimientos"

"Fue oír tu llanto, a escasos centímetros de nosotros, y el amor más animal, puro e incondicional, brotar por sí solo. Al igual que nuestras lágrimas eh...He de confesaros que, ver a mi marido tan tremendamente emocionado (incluso más que la primera vez), me hizo darme de frente con una realidad, que obviamente tenía en cuenta; y que igual, si cabe, lo hizo todo aún más emocionalmente incontrolable..."

"En esta ocasión, no veníamos a por nuestra hija… sólo a por nuestra hija ( que ya lo es todo) También veníamos a buscarle a Maia, el mejor regalo del mundo: SU HERMANA. Deseando volver a casa, para grabarnos en la retina su reacción al verla en directo... que esto del COVID, nos ha hecho cambiar radicalmente el cuento".

Un texto que María ha acompañado con una imagen en la que podemos verla en el hospital dando el pecho a la pequeña Olivia.

Una niña que llegó al mundo a través de una cesárea y por eso María ha querido hablar días más tarde de los miedos a los que tuvo que enfrentarse ya que ella hubiese preferido un parto vía vaginal.

"Y al final... otra cesárea! Esta es mi última foto con barriga... (bueno ahora sigo teniendo barriga, pero al más puro estilo slime). Esta es la última foto en la que Olivia era nuestra, para, en unos minutos, pasar a ser del mundo... Esta es la última foto en la que Maia seguía siendo la bebé de la casa, para convertirse en hermana mayor... aunque de momento sólo pueda ejercer vía telefónica...".

"Esta es la última foto en la que monitorizada y con contracciones, guardaba aún la esperanza, de parir por vía vaginal.... Me apetecía vivir ese otro tipo de parto… Me apetecía irme a casa sin una operación mayor en el cuerpo… Me apetecía ayudar al bebé a entender que tras el canal del parto, le esperaba el mundo... Pero no pudo ser…".

"Un parto programado, por necesidades de guión, y una cesárea anterior, de la que no conocíamos 100 por 100 el estado de su cicatriz, impidieron hacer otra cosa... había riesgo de desgarro, y yo ya soy madre de una que espera en casa, así que no nos la podíamos jugar. Me disguste? Si! Pero solo cinco minutos... es lo que me permití... Mi optimismo, el apoyo total de mi marido, la nueva bebé que esperaba pacientemente... Y la propia vida, nos hizo relativizar y decidir. No había tiempo y sí muchas ganas".

"Que sí, que ahora la operación me la llevo yo… Pero qué importancia tiene? Cuando todo ha salido bien... Y yo, gallega y dura por naturaleza, tengo salud para soportarlo y una familia maravillosa en quién apoyarme. Ahora, me tocará tomarme la vida con calma… No estoy acostumbrada, ni apenas sé… Pero todavía estoy a tiempo de aprender.".

Síguele la pista

  • Lo último