Lucía Rivera saca las garras por su padre: "No voy a hablar de su vida"

Lo que nos gusta a los redactores un buen sarao. Se nota porque, ante cualquier noticia de actualidad, buscamos ponernos en contacto con las fuentes más cercanas, a fin de conocer un poco más qué es lo que ha sucedido y cómo están yendo las cosas en ese sentido. Por eso mismo, ante la noticia de la grave crisis por la que están pasando Cayetano Rivera Ordóñez (45) y su esposa,Eva González (41), no es de extrañar que compañeros nuestros hayan querido preguntar a la hija del primero, Lucía Rivera.

Fiel a su honestidad y siempre celosa de su intimidad, la hija del torero y Blanca Romero ha querido mantenerse al margen de todo esto. Durante este tiempo ha demostrado ser un gran apoyo para Cayetano con quien, a pesar de que ha tenido malas épocas durante su adolescencia, sí que comparten a menudo buenos ratos. Así lo vimos hace poco, cuando padre e hija quedaron para comer en Madrid poco después de conocerse que el hijo de Carmina Ordóñez estaba viviendo lejos de la presentadora de 'La Voz'.

En este sentido, conviene recordar que la pareja ha superado varias crisis matrimoniales, incluida una que trajo mucho de qué hablar, la de Karelys Rodríguez (hubo pruebas), pero siempre se han mantenido unidos frente a las adversidades. Por eso ahora extraña el paso que tanto el torero como la modelo han dado en su vida personal; de ahí que los periodistas hayan querido preguntar a su hija Lucía acerca de todo este entramado que está ocupando las portadas de las principales cabeceras.

"Estoy muy bien, muy bien, gracias", ha comentado la joven, intentando evitar las cámaras y los micrófonos en una de estas pilladas en el centro de la capital. Si bien no ha respondido cómo se encuentra su padre, sí que ha dicho un escueto "sí" a la pregunta de si le tiene cariño a Eva González y le desea lo mejor. Lo curioso es que horas antes dejó bien claro ante los micrófonos que no estaba dispuesta a formar parte de esta polémica ni a hablar de la vida privada de Cayetano Rivera Ordóñez, por el simple hecho de que tampoco habla de la suya propia.

"Creo que deberíais respetarlo y no hacer un juicio público de las relaciones sentimentales que hacéis. No se puede hacer un juicio público de estas cosas y creo que deberíais respetarlo, porque sabéis las cosas cómo duelen. Me horroriza encender la tele y ver estas cosas que hacéis a veces de 'esta', 'la otra'. Yo alucino", despachó tranquilamente acerca de los muchos rumores y comentarios vertidos en los medios de comunicación a raíz de la separación (de momento física, que no legal) de su padre y su actual mujer.