Joaquín Prat cuenta la realidad de su hermano en redes sociales

No se habla de otra cosa desde que concedió una pequeña entrevista. Sí, hablamos del hermano de Joaquín Prat, que se ha convertido en el protagonista absoluto de las redes sociales y los medios por sus declaraciones sobre su vida... En la calle. Federico Prat asegura que pide limosna para sobrevivir y, ante el revuelo que se ha montado, la familia ha querido hablar, incluido Joaquín, que ha publicado un mensaje en Instagram.

Es un caso delicado, de ahí que haya que contarlo con cierto tacto, ya que tanto Federico como su familia no lo están pasando bien y es que al parecer, la realidad es muy distinta y la culpa la tendrían las drogas.

Federico contaba él mismo en una entrevista en Canal 8 que su situación es muy precaria, que no tiene trabajo y que vive como puede en Cádiz: "Hace nuevo años que me vine por amor, he estado yendo y viniendo porque yo vivía en Chipiona y ahora ya me he establecido aquí. Estoy viviendo en la calle porque no me queda otra".

Pero parece que otra sí la quedaba, al menos eso es lo que dicen sus hermanos Joaquín, Alejandra y Andrea, en este texto que han subido a stories junto a una foto donde también aparecesu madre, Marianne Sandberg.

"Mi hermano Federico es un ser maravilloso con un corazón de oro. Es y ha sido siempre querido en casa: educado, cariñoso, sensible y es, desgraciadamente, también un adicto. Hace más de 12 años que mi madre y nosotros como hermanos hemos intentendo ayudarle, acompañándole en numerosos tratamientos de rehabilitación, centros de toda índole y también en casa. Finalmente, y tras un duro camino, especialmente para mi madre, esto solo lo comprenderá quien haya tenido que vivir lo mismo en primera persona, el propio Fede escogió vivir en el sur y continuar con su adicción. Durante todo este tiempo mi madre se ha hecho y sigue haciéndose cada mes cargo del lugar en el que vive y, aunque ha tenido oportunidades, ha continuado inmerso en el mundo terrible e inmundo de las drogas. Ya no esperamos que algún día se cure, pero sí tener privacidad familiar para seguir gestionándolo de la manera menos dañina para todos", se puede leer.

"Las cosas, a veces, no son lo que parecen. Son muchos años de sufrimiento que solo nosotros conocemos. Ojalá nadie tuviera que pasar por esto. Ni el enfermo ni la familia que, desgraciadamente, sufre igual. Juzgar es muy fácil, pero la vida no es blanco o negro. Nuestra familia es una piña para lo bueno y para lo malo y así va a seguir siendo. Gracias por la comprensión.".

Las declaraciones de Federico

"Ahora mismo tengo un techo donde quedarme, tengo mi casa y pago el alquiler con lo que saco de la calle. Yo no me lo gasto en droga ni alcohol, solo en mi alquiler e invito a todo el mundo a que lo compruebe. Si alguien tiene algún puesto de trabajo en lo que sea... Yo soy marino mercante, pero de camarero, de pintor... Lo que sea, que piense en mí. Soy una persona seria y trabajadora, invito a todo el mundo a que venga a la calle Real a verme, estoy siempre ahí sentado".

Respecto a sus familiares, Federico ha contado que no suele recurrir a ellos ya que con sus hermanos ahora mismo la relación es "delicada".