Las historias de terror existen: encuentran un cadáver en casa de Kate Middleton y el príncipe Guillermo

No hace falta que te lo cuente Netflix, ya lo hacemos nosotros.

El príncipe Guillermo y Kate Middleton en los premios BAFTA

El príncipe Guillermo y Kate Middleton con looks reciclados. 

/ Ian West

Si es que por muy 'royal' que seas, si te toca vivir algo chungo, pues te toca. Lo decimos porque a los futuros reyes de Reino Unido, hablamos delpríncipe Guillermo y de Kate Middleton, les ha tocado algo muy pero que muy desagradable. Acaban de encontrar un cadáver de una mujer en el lago de Kesington Gardens, el jardín en el que se encuentra edificada su residencia permanente. ¡Qué fuerte!

La noticia la avanza el periódico británico Daily Mail y la verdad es que da cosa contártelo pero tiene que ser porque es impactante: Los duques de Cambridge disfrutan a diario de unas preciosas vistas de uno de los parques más bonitos, cuidados y famosos de Londres. Kesington Gardens. Su casa está ubicada en medio de dicho parque, y claro, han vivido en primera persona todo lo que allí acaba de pasar. Hablamos del hallazgo de un cadáver en el lago que rodea el palacio.

Al principio se creía que se trataba de una mujer cuya desaparición había sido denunciada, pero por lo visto no. De momento no se sabe a quien pertenece el cuerpo encontrado, aunque la policía está ya llevando a cabo una investigación.

El suceso ha ocurrido la semana pasada en un estanque que rodea la casa en la que viven los duques. Parece una 'peli' de terror, de las que ponen en la tele por Halloween, pero en realidad hay varias zonas del parque que están abiertas al público. Es común ver a gente pasear, hacer deporte o un pícnic por allí. La zona está dividida en departamentos, y los príncipes están en el 1A, el edificio principal del complejo. Los Windsor, los duques de Kent, la princesa Eugenia y su marido también viven allí, por lo que la seguridad y la vigilancia policial suele ser máxima.

Cómo ha llegado el cadáver al lago de los Kesington Gardens es todavía un misterio por resolver.

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